domingo, 28 de febrero de 2010

Alazos - Ed. 006

Impresiones sobre la sentencia C-141 de 2010

He tenido la oportunidad de conocer el comunicado de prensa que emitió la Corte Constitucional, respecto del referendo.  He podido conocer las reacciones de primera mano de los medios de comunicación, de algunos columnistas, y de algunos blogs.  Teniendo en cuenta que este no es un espacio de enseñanza jurídica, sino un blog de opinión crítica relacionado con temas afines al mundo jurídico, no pretendo aquí explicar por qué la Corte hizo o dejó de hacer.  Al respecto, considero más que oportunas y pertinentes las consideraciones de Gonzalo Ramírez Cleves en su blog, en la entrada titulada “Respuesta a Tomás Marino sobre la inconstitucionalidad el reverendo reeleccionista.  Sentencia C-141 de 2010”.  Por considerarlas de bastante rigor y sesudez, remito a quienes estén interesados a ese ingreso del Profesor Ramírez, y también a los comentarios que allí aparecen, en la medida en que allí también hay aportes interesantes por parte de algunos comentaristas y del mismo autor.

Dicho lo anterior, me centraré en algunos aspectos que considero vitales de esta sentencia, y su impacto en el país.  En primer lugar, considero que lo más valioso de esta sentencia fue no haber agotado el examen estrictamente formal, sino haber profundizado en aquello de la ‘sustitución’ de la Constitución.  Evidentemente, esto no es un aspecto formal de la sentencia, y por tanto, podía dejar de estudiarse.  Según leí una entrevista dada por el Magistrado Mauricio González Cuervo, a ello se llegó en gran parte gracias a las intervenciones ciudadanas, que reclamaban este estudio.

En segundo lugar, no estoy de acuerdo con que esta sentencia represente la fortaleza institucional del país.  Considero que esa es una visión que va más allá del alcance mismo de la sentencia.  Sí demuestra que la Corte Constitucional hizo el ejercicio bien hecho, y que aunque pudo haber motivaciones políticas (no me consta), dicha motivación política no estaba huérfana de argumentos jurídicos serios.  Eso es valioso.  No obstante, pasar de la seriedad que tuvo la Corte, a pensar que este es un país institucionalmente fuerte es una generalización MUY apresurada.  No veo ningún soporte válido para llegar a esta afirmación.

En tercer lugar, considero ampliamente rescatable el hecho de que la Corte entrara a analizar la razón de ser de las formas.  Ya sea que se trate de la elaboración de leyes, de un proceso judicial, o para que la ciudadanía se pronuncie respecto de alguna iniciativa, entender que las formalidades son un ‘instrumento’ vital para el ejercicio del poder, es ampliamente rescatable.  La formalidad se estaba convirtiendo en un comodín jurídico para todos, y ello se vio materializado en casos como la emergencia económica derivada del caso DMG, así como la reciente emergencia social que rodeó la cuestionada reforma a la salud.  Este punto es muy importante de cara al futuro jurídico del país.

Por último, considero que como nunca antes, el desarrollo del proceso de control constitucional ante la Corte fue un ejercicio político y jurídico de gran valor para el país.  Hace bastante tiempo no veía yo una focalización que involucraba a ciudadanos, profesores, litigantes, jueces, medios de comunicación y políticos de manera tan marcada como se dio en este caso.  A pesar de ser esto un aspecto que no es propio de la sentencia misma, si se trataba de una externalidad que influyó de manera decisiva en el contenido de la misma.


La preinscripción y el derecho a rogar

Con bastante expectativa recibí la noticia del lanzamiento de la página www.expresa.la.  La propuesta, encabezada por César Rodríguez Garavito, abogado, columnista, parte del equipo de Dejusticia, y profesor de la Universidad de los Andes.  El lanzamiento de la página se dio dentro del contexto de un Congreso que se realizaría en la Universidad de los Andes.

Al conocer del evento, decidí revisar el tema, y encontré que lo promocionaban como un evento de acceso libre, y que por tanto, requería de una preinscripción para efectos de ‘conteo de cabezas’.  En realidad, era posible asistir al evento presencialmente o a través del acceso vía streaming, en Internet.  En cualquiera de los dos casos, la preinscipción era un prerrequisito.  Ante las dos opciones, consideré que si iba a sacar el tiempo para asistir al evento, valdría la pena ir directamente al Auditorio Lleras de la Universidad de los Andes, lugar en donde se habría de realizar.

Efectivamente, me inscribí con el nombre de mi alter ego, y el día de la inauguración, intenté sacar las cuestiones de trabajo en tiempo, para poder llegar puntualmente.  Al llegar al lugar, me hicieron ir a buscar una ficha numerada, que supuse yo que era para contabilizar a los asistentes.  Lo hice.  A la entrada del auditorio, entregué la ficha y seguí, con la sorpresa que el auditoria estaba absolutamente lleno, y habían algunas personas de pie, esperando para ver cómo se acomodaban.  Yo resulté parte de este grupo de individuos.  Esperamos algunos momentos, pero no parecía claro qué se iba a hacer.  Por mi parte, esperé pacientemente para ver qué ocurría.

Lo que aconteció es que una señora –imagino yo que debe ser co-dueña de la Universidad, o alguna familiar de nuestro Presidente, o gran financiadora del evento– se acercó, y con una dulzura característica del vinagre, empezó a dar órdenes a quienes estábamos de pie, como si fueramos peones de alguno de sus latifundios, y ante la perplejidad de todos, se acercó uno por uno a los asistentes a decir que si no ‘encontrábamos’ una silla, nos teníamos que ir.

Entendí, entonces, que con total seguridad cometí un error al momento de leer las condiciones para asistir al evento.  Estoy seguro que en los apartes relacionados con la asistencia al evento, seguramente se mencionaba que la preinscripción otorgaba el derecho personalísimo a rogar por una silla.  ¡Lástima!, porque tal vez así hubiera llevado mi kit de Gaviota llorosa y un par de rodilleras para poder tratar a la señora con la sumisión que ella exigía.  No sé que habrá sido del evento.  Probablemente haya sido un éxito.  Sé que no me extrañaron demasiado cuando opté por salir caminando entre quienes sí habían leído el aviso sobre el reconocimiento a su derecho personalísimo a rogar, y ejercían su derecho como corresponde.  Nadie extraña a quien no lee bien las instrucciones.


Chile, la integración y la hermandad

Antes que nada, envío desde este espacio, un gran abrazo a la gente de Chile, y en especial, a los colegas bloggers de ese país.  Es lamentable lo ocurrido allí, como también lo que ocurriera antes en Haití.

En múltiples escenarios, los líderes de América hacen constante referencia a la necesidad de integrar los pueblos de América.  Se escuchan discursos sobre pueblos hermanos, las alianzas y la cooperación.  Nunca más que ahora se podrá poner a prueba este conjunto de buenos deseos.  A diferencia de Haití, en donde realmente el país nunca ha contado con una economía sólida, con planes sociales, ni con industria, Chile sí es un país que se ha destacado por su impulso económico, la adopción de políticas sociales y económicas sostenibles, y un programa estatal serio.

Ahora, el país se encuentra azotado por una catástrofe, y requiere redoblar esfuerzos para minimizar pérdidas y dinamizar la restauración de lo que ya había.  Será interesante ver si los demás países, que nos llamamos ‘hermanos’, atenderemos el llamado de incentivar la producción, dinamizar la economía y brindar cooperación social a diferentes niveles.  Espero que tanto discurso se convierta en una realidad, para que Chile ocupe nuevamente el lugar que tenía, y pueda rápidamente solucionar las necesidades de sus habitantes.

Sería interesante conocer la actitud de las instituciones financieras ante el desastre.  Será que tenderán la mano, como el mundo lo hizo con ellos en momentos de crisis, o será que responderán con demandas judiciales, créditos costosos (el endeudamiento es inevitable) y objeciones a reclamaciones por parte de aseguradores y reaseguradoras.  Será decisivo conocer qué tratamiento se le da a esta clase de eventos que constituyen fuerza mayor.


La Corte Suprema y sus elecciones

He señalado en este espacio, que la Corte Suprema de Justicia de Colombia tiene una gran deuda con el país y consigo misma, como consecuencia de la vanidad.  La Corte Constitucional ha mostrado su independencia, sin necesidad de ensalzarse a sí misa y denigrar de los demás.  La Corte Suprema, por el contrario, ha asumido sus debates como una novela romántica, de amores, desamores y suspicacias.

He opinado que las trabas en las elecciones de la Corte (Fiscal General y Presidencia de la Corporación) son autoimpuestas, y más aún, por razones políticas.  Tengo la certeza que la viabilidad y la inviabilidad de ternas para Fiscal, se trataba de un argumento para dilatar a la espera de que se definiera el escenario político del país.  Por esto último, me refiero específicamente a que era prerrequisito conocer si el país seguía con Uribe o sin Uribe.  El panorama se despejó.  No nos extrañemos ante nombramientos veloces en los próximos días.

En cierta forma, espero que no sea así, y que las motivaciones para las dilaciones sean reales y no quiméricas, como creo que es el caso.  En cierta forma, sin embargo, quisiera que sí fuera así, porque demostraría que la Corte Suprema de Justicia es una corporación seria que atiende al interés del Estado, y no a caprichos políticos.  Una demora por causas reales y no quiméricas, demostraría que en realidad se están atendiendo criterios diferentes al ‘factor Uribe’.  En los próximos días, sabremos si las motivaciones eran reales o fantasiosas.  El tiempo lo dirá.  Considero, que desatado el nudo en cuanto al Fiscal General, la elección del Presidente de la Corporación vendrá por añadidura.
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miércoles, 24 de febrero de 2010

Corte Suprema de Justicia: Unas de cal y unas de arena

En los últimos días, he leído acerca de cuatro situaciones que rodean a la Corte Suprema de Justicia, particularmente en lo relacionado con la Sala de Casación Penal del organismo. Creo oportuno pronunciarme sobre cada una de ellas, y explicar mi posición al respecto.


La Corte y la masacre laboral en la Fiscalía

En esos términos, o unos muy parecidos, se ha vendido al público la decisión adoptada por la Corte Suprema recientemente, relacionada con la orden dada al Fiscal General de la Nación encargado, Guillermo Mendoza Diago, para que haga efectivos los resultados del concurso de méritos que se hubiere realizado para proveer los cargos de la entidad. Ese ‘hacer efectivo’ involucra, por supuesto, nombrar en propiedad a quien ha ganado el concurso con sus propios méritos, y conforme a las reglas de juego que fueran previamente trazadas.

La cara contraria de la moneda es la que se ve en los casos de aquellos que deben salir de la entidad por no haber pasado los exámenes. Se reclama acerca de la estabilidad laboral: ¿puede un interino (provisional), reclamar esto? Creo que no es posible. Se reclama acerca de la redacción de las preguntas: parece ser que esto fue irregular, en cuanto a los contenidos. A estas alturas del proceso, sin embargo, es absolutamente impertinente alegar sobre el contenido del examen. Los resultados ya han sido convalidados y bajo ese entendido, lo único que resta es posesionar a quienes ganaron ese concurso.

En este caso, comparto la postura de la Corte. Estoy de acuerdo con aquellos críticos que señalan que esto va a tener un importante costo en cuanto a demoras, mientras los nuevos funcionarios se ‘empapan’ de los procesos que tendrán que llevar e investigar. Sin embargo, los críticos venden este escenario como si tratara de una demora sobreviniente. El sistema de corte acusatorio arrancó cuasi-colapsado. Ahora, está colapsado. El sistema de corte mixto se cambió precisamente porque se decía que era demorado e ineficiente. Es decir, en ambos casos, hay demoras evidentes y congestión. Le diferencia es que, ahora, quienes han de asumir esas responsabilidades son teóricamente los más capacitados para hacerlo. Seguro. Al corto plazo, puede parecer muy costoso, pero al mediano y largo plazo, sin duda tendrá que traer resultados positivos. Cuando menos, no puede negarse que es mucho más justo que los más capacitados lleguen a los cargos, y no que los que más tiempo lleven aferrados a ellos crean haber obtenido derechos adquiridos sobre estos cargos.

Buena decisión de la Corte. Para quienes quieran una explicación un poco más detallada por parte del Magistrado Alfredo Gómez Quintero, pueden leerla en esta entrevista publicada por el diario El Tiempo.


La Corte y la extradición

Hace algunos días, nuevamente se suscitó el debate relacionado con la postura actual de la Corte Suprema de Justicia, relacionada con la posibilidad de negar extradiciones solicitadas con el lleno de requisitos formales, en la medida en que no se cumpla con la garantía de los derechos de las víctimas en Colombia. Se hace referencia, en los últimos conceptos emitidos por la Corte, a la necesidad de garantizar la verdad, la justicia y la reparación, tres pilares fundamentales sobre los cuales se ha edificado la Ley de Justicia y Paz.

Debo admitir que la postura asumida por la Corte es loable desde la óptica filosófica, en la medida en que busca frenar el creciente índice de exportación de presuntos delincuentes, en aras de cumplir con una serie de garantías para los ciudadanos colombianos, quienes deberían constituir el foco de interés de las autoridades nacionales. Al menos, eso es lo que dice nuestra Constitución. Por ese lado, la postura de la Corte es entendible. Sin embargo, con el perdón de los amantes de la Corte y de su independencia, eso es una postura política, y no jurídica.

El verdadero jurista, entiende que el ordenamiento jurídico no es fruto de la voluntad de nueve señoras y/o señores con toga, sino que implica un proceso que parte desde la Constitución misma, la proyección de leyes, su debate y aprobación, y su salvaguarda por parte de los jueces. Lamentablemente, lo que nuestras leyes claramente han señalado desde hace bastante tiempo, es que a la Corte le corresponde realizar un análisis formal de las solicitudes de extradición, y en especial la verificación de que se cumpla con la doble incriminación (que la conducta por la cual se solicita la persona en extradición sea delito en el Estado requirente y en el Estado requerido) y la garantía de la identidad del reo. Nuestra ley no menciona que se puedan invocar garantías propias de procesos ajenos a la solicitud misma de extradición, y por ello, al incluir este estudio, la Corte se está extralimitando en sus funciones. Loable, insisto, pero completamente contrario a la ley. Es el Presidente de la República quien está facultado para realizar análisis de conveniencia en materia de extradición. No la Corte Suprema.

Al hacer esto, la Corte está ejerciendo un control material a la solicitud de extradición, y ello riñe con la ley misma. ¿Puede aplaudirse, desde el punto de vista jurídico, un juez que hace lo que considera correcto aunque ello vaya en contravía de la ley que teóricamente es lo que el pueblo considera correcto? Muchos lo hacen. Desde mi perspectiva, eso riñe con la democracia y riñe con las fibras íntimas de lo que debe ser un juez. ¿Puede el que lucha a favor de la institucionalidad, hacerlo saliéndose de la misma? Recomiendo, para quienes quieran ahondar un poco en el tema, leer la discusión sobre justicia Vs prudencia, que plantea Cicerón en su Tratado sobre la República.


Las elecciones en la Corte

Si algo ha dejado claro todo el problema de la elección de Fiscal General de la Nación en la Corte, es que estas elecciones son absolutamente políticas. Para no tornarme demasiado repetitivo al respecto, me remito a las ideas plasmadas en la entrada titulada “Sobre la hipocresía judicial”. Vemos igualmente, que la elección del Presidente de la Alta Corporación ha sido igualmente problemática. Esa decisión, que claramente es de carácter político, y sobre esto no existe discusión, ha demostrado que detrás de toda elección en ese organismo, existen tensiones políticas palpables, que explican de manera clara la presencia de votaciones inexplicables.

Veo con inmensa preocupación, que gran parte del problema al interior de la Corte se da a raíz de no estar completos todos los Magistrados (por vencimiento de periodos) lo que hace que la obtención de mayorías se dificulte mucho. El problema es que esta situación, entre más se prolongue, solo tenderá a agravarse más y más. Esto es lo que ocurre cuando primero se vota y luego se busca concertar. Mientras tanto, quien está de interino en la Fiscalía, debe realizar la sucia labor de botar del trabajo a los otros interinos. ¡Qué ironía! Esperemos que la sensatez algún día llegue a los despachos de los ‘Honorables’ y puedan volver a completar las fichas que se requieren para que la justicia funcione, aunque sea medianamente bien. Nadie pide que las votaciones sean dadas sin reflexión. El problema es cuando nos quedamos en la reflexión y no actuamos. A ellos, les recomiendo leer la Oración Fúnebre de Pericles, en especial su reflexión sobre la tensión entre acción y reflexión… “atrevimiento irracional y deliberación racional”…


La Unión Interparlamentaria y la Corte

Preocupa un poco que organismos como la Unión Interpalamentaria, que es un organismo internacional de protección a los parlamentarios en el mundo, tenga necesidad de pedirle a la Corte Suprema de un país que garantice juicios justos. Esto último lo acaba de solicitar el mencionado organismo a la Corte Suprema de Justicia de Colombia, particularmente en lo que tiene que ver con los casos de Álvaro Araujo Castro, y Wilson Borja.

En el primer caso, haciendo un breve repaso de lo que ha sido el juicio contra el excongresista, observa el organismo internacional que se ha sometido a Araujo a un juicio largo y dispendioso, y que aún no ha sido oído por sus juzgadores, a pesar de sus ruegos en las diligencias judiciales, y a través de los medios de comunicación.

En el segundo caso, hace referencia la Unión Interparlamentaria al caso de Wilson Borja, a quien se le ha iniciado un proceso por farcpolítica, aunque aparentemente no existe siquiera una sola prueba medianamente seria que permita colegir que existen vínculos con esas organizaciones.

Muchos se preguntarán por qué cobra relevancia esta clase de pronunciamientos. La razón es muy sencilla. La Corte Suprema de Justicia, que ha sido ensalzada por algún sector de la opinión pública como el bastión de la independencia y la verdadera justicia, ha tomado una postura EXCESIVAMENTE inquisitorial. Bajo ese entendido, ha considerado que puede juzgar a los aforados, así ya no tengan realmente fuero. Impone medidas de aseguramiento consistentes en detención preventiva, por si acaso se requiriere. Y con la noticia que puede observarse en el diario El Espectador de hoy, relacionada con la condena ejemplar al excongresista Álvaro García creo que no queda duda acerca de la severidad de la Corte en sus condenas, a pesar de contar con un Código Penal garantista.

¿Será que está de más la solicitud de la Unión Interparlamentaria? Personalmente, creo que no.
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viernes, 19 de febrero de 2010

Reflexiones acerca del cariño a ‘algo’ más grande

Es curioso ver de qué manera la vida nos brinda lecciones que de otra manera serían difíciles de aprender.  Ayer me vi envuelto por una marcha –de las más grandes que he visto en los últimos tiempos– en contra del gobierno, principalmente por aquello de la reforma a la salud, que ha sido considerada por muchos como una verdadera patraña puesta en marcha por el gobierno.

Ver a esas personas enardecidas contra el gobierno me llevaron a pensar mucho acerca de varios aspectos.  En primer lugar, sigo creyendo que las marchas no sirven para nada.  Es verdad que esta vez la marcha sí era una marcha de protesta y no un fashion show, pero realmente puede uno apreciar que en el país tenemos ‘marchadores’ profesionales.  Estos ‘marchadores’ son los que salen cada semana, por el motivo que sea, a protestar contra el gobierno.  Uno los puede identificar con facilidad porque semana tras semana usan exactamente las mismas arengas para marchar.  Utilizando el término acuñado desde que escribí “Reflexiones sobre de las estrellas”, podríamos afirmar que estos señores no son marchantes sino “‘marchadores’ estrella”.

En efecto, los estudiantes ‘marchadores’ estaban allí como siempre:

“¿Quiénes somos?:  Estudiantes.”
“¿Qué queremos?:  Soluciones”
“¿Qué nos dan?:  Represión, represión y bolillo por montón”

Convenía con un amigo que se vio afectado por la parálisis del tráfico generado por la marcha, que probablemente un 80% de los ‘marchadores’ realmente no tenían la menor idea de por qué estaban marchando.  Ese grupito de estudiantes, así como muchas de las grandes centrales obreras (sindicatos) siempre están en todas las marchas, cantando las mismas cancioncitas.  El otro 20%, al parecer sí sabía qué era lo que estaba haciendo y realmente estaban ejerciendo su derecho a protestar de manera seria y pacífica.  Eso, aunque no me guste, tengo que respetarlo.

Pasemos ahora, de aquel grupo de personas que no sabían realmente qué estaban haciendo allí, a la contraparte, el Gobierno.  El Presidente y sus Ministros sí saben lo que están haciendo allí.  La pregunta es:  ¿hacen lo que realmente dicen que hacen?  O mejor aún: ¿sabemos nosotros qué es lo que realmente hacen?  Los escándalos de las últimas semanas en materia de salud, transporte y hacienda, parecería indicar que no.  Eso sí, confieso haber visto al Presidente Uribe dar más y más explicaciones sobre diferentes temas.  Diría él que con una “total apertura hacia la crítica”, pero con un “gran amor por esta patria”, hace A, B y C.

Llevo casi ocho años escuchando del Presidente que todo lo que hace lo hace con un “gran amor por esta patria”.  Confieso que las primeras veces que escuchaba eso me gustaba saber que mi Presidente era un verdadero patriota.  Hiciera las cosas bien, o hiciera las cosas mal, veía yo que el gobierno era bien intencionado.  Ahora, ya mucho tiempo después, observo que la frase de cajón acuñada por nuestro ‘Mandatario’, es como la manifestación de amor de aquellos dementes que dicen amar a sus parejas o a sus hijos, y que se los demuestran propinándoles sendas golpizas.

El amor, o el cariño no se prueba hablando mucho de qué tanto se siente, o de cómo las acciones de uno están guiadas por ese sano sentimiento.  El amor, el cariño, se demuestra día a día.  No requiere el reconocimiento de los demás, y no requiere publicidad en ningún otro lado.  Requiere actuar por el bien del otro, y no decir que se actúa por el bien del otro.  Eso es algo que considero yo fundamental en cualquier relación en la que medie el amor o el cariño.  Si esos sentimientos son recíprocos, necesariamente la situación ha de mejorar, porque existe sintonía de esfuerzos, sincronización de actos, y homogeneidad de causa.

Este punto, sin embargo, cobra más relevancia cuando se trata de un amor o cariño a algo más grande, como un grupo de personas, una institución, o un país.  Ayer mismo, tuve la oportunidad de ver claros ejemplos de ello.  Vi a hinchas de Independiente Santa Fe, un equipo de fútbol bogotano, en su ejemplar comportamiento el miércoles en Bogotá.  Ellos, que antes del partido manifestaban un amor inigualable por el club, ser hinchas fieles y abnegados de su equipo, eran los mismos que minutos después se deshacían en insultos y vejámenes al técnico del equipo.  La razón:  no ganar.  Ese es el concepto de amor por la camiseta que tienen estos pésimos hinchas.  “Te amo Santafecito”, dicen ellos.  “Te amaré Santafecito, si me haces feliz primero”, realmente piensan.  Dejo expresa constancia aquí, sin embargo, que no soy hincha de ‘Santafecito’, utilizo el ejemplo, porque era el caso palpable del día de ayer en materia de fútbol.

Tuve la oportunidad de ver, antes de conocer las imágenes del caso ‘Santafecito del alma’, al Ministro de Protección Social, habitual invitado a este espacio, mostrando todo lo que hace por el pueblo.  Perdón, todo lo que dice hacer por el pueblo.  Lo que no suele decir, es lo que hace por sí mismo con antelación a obrar para el pueblo…  En algunos libros de asesoría en materia de amor se dice lo siguiente (más o menos):  “Nunca digas ‘te amo porque te necesito’.  Di mejor: ‘Me amo, luego puedo amarte’”.  El Ministro es de los que dice amar a su pueblo, pero su frase ha variado un poco:  “Me amo, luego digo que te amo”.  Me gustaría saber cuántos colombianos se sienten realmente amados por el Ministro.  Me gustaría entrevistar a ‘la patria’ para saber si siente que su Presidente la ama tanto como dice hacerlo, incluso a costa de despedazar su Constitución.

Cuestión diferente es la que he visto recientemente en Blawggers Internacionales.  Este grupo de bloggers jurídicos, creado hace algún tiempo con los esfuerzos aunados de algunos colegas, ha pasado por muchas fases.  Todos decimos que pertenecemos al grupo, y probablemente encontrarán en muchos blogs un logo rojo que nos identifica como miembros del grupo.  Sin embargo, he sido abierto crítico aquí, en nuestras reuniones de Skype y en otros escenarios, acerca de ese ‘amor’ por el grupo que profesan algunos.  A todos nos gusta pertenecer al grupo.  A todos nos gusta aparecer en el blog colectivo y en el catálogo del blog.  ¿Sin embargo, nos gusta a todos trabajar por el grupo?

Esa reflexión la he planteado a varios amigos blawgers, y no siempre gusta.  También me la he planteado a mí mismo, y con ello procuro no convertirme en una simple Gaviota parlanchina, sino también ser un miembro útil al grupo.  No siempre lo soy, y no siempre me motiva serlo, por la evidente falta de compromiso de muchos.

Conozco, sin embargo, a alguien que a pesar de la falta de esfuerzos colectivos, a pesar de no contar con ayuda, y a pesar de tener que dedicar mucho de su tiempo de descanso al grupo, no protesta.   No exige.  Simplemente da, y da mucho.  Se trata del gran amigo Carlos Javier Delgado, nuestro bumangués en tierra de la plata, administrador del blog Responsabilidad y Derecho.  El promotor de la ética hacker en materia de derecho y blogs, no enseña predicando.   Enseña haciendo y también predicando.



A Carlos Javier Delgado le debemos el cambio de diseño en la plantilla del blog de Blawggers Internacionales.  Nos pidió consejos, probó, ensayó, discutió, y finalmente lanzó el producto terminado.  No me cansaré de agradecerle sus esfuerzos y su amabilidad.  A él también le debemos el diseño del blog del 1er Encuentro de Blawggers, la creación y manejo del ‘Taller’.  Esto último es un espacio en el blog colectivo, donde Carlos Javier atiene las dudas de los demás miembros en cuanto al diseño y utilización de herramientas en el blog.  Es un espacio de tutoriales acerca de cuestiones técnicas que ha sido de gran utilidad para muchos.

Nuestro amigo fue de los que acudió a la convocatoria del encuentro celebrado en agosto en Bogotá, en compañía de su Jime, participó en todas las actividades, y como ya lo mencioné, se lució ante toda la comunidad.  Fue de los que asistió a casi todos los encuentros virtuales realizados vía Skype, y aportó ideas en todos ellos.  Ha sido el motor y alma del concurso Premios B.I. 2008 y 2009.

Me gustaría que revisen cuantas veces ha pedido él que le den algo a cambio, o que le reconozcan algo.  Me gustaría que revisen cuantas veces a dicho él que todo lo hace por el inmenso amor o inmenso cariño que le tiene al grupo…

Como lo mencioné al principio, la vida tiene formas muy curiosas de brindarnos lecciones.  Esperemos que no se traten de lecciones que simplemente vemos y no seguimos.  Ojalá sea de esas lecciones que interioricemos y podamos aplicar en nuestras vidas.

‘Pico’ a Carlos Javier Delgado.  ¡¡Gracias por todo, y muchas bendiciones para ti y para tus seres queridos!!
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domingo, 14 de febrero de 2010

Estamos alegres II: Sigamos matando animales

Hace un poco más de un año, escribí una crítica frontal contra el maltrato animal y contra aquellos que disfrutan con ciertas formas de maltrato animal.  En esa entrada, titulada “Estamos alegres: matemos animales y golpeemos personas”, me enfoqué en las corridas de toros, que todavía siguen teniendo vergonzosa cobertura y promoción en los medios de comunicación tradicionales.  Intentar hacer pasar a personas como “El Juli” o “Enrique Ponce” como grandes deportistas, heroicos seres humanos.

No se trata aquí de repetir las consideraciones que ya se consignaron aquí.  Sí he de reiterar que la actitud persiste, aunque en la actualidad somos cada vez más los que rechazamos esta clase de maltrato animal.  Incluso más seremos los que estamos en contra de la matanza sin sentido de animales como los delfines, focas o ballenas.  Esto último cobra relevancia en la actualidad.  He recibido, a través de Facebook, una notificación de un grupo creado para efectos de defender los derechos de los animales, que a raíz de la reciente inauguración de los Juegos Olímpicos de Invierno.

Recordemos que en Canadá, donde actualmente se disputan las justas olímpicas, es donde anualmente se presenta una de las matanzas más grandes de focas en el mundo.  Probablemente muchos de los lectores han visto imágenes desoladoras de estas matanzas.  Acá, por respeto a tan bellas criaturas, tan solo utilizo la imagen de una de estas focas bebés, para que sepamos qué es lo que estamos haciendo, o mejor, qué es lo que seguimos tolerando que ocurra.



La matanza aparentemente seguirá, y mientras tanto, nosotros estaremos hipnotizados por los juegos olímpicos.  Para quienes estén interesados en conocer de esta situación, revisen este enlace.  Advierto, de antemano, que contiene imágenes impresionantes y desoladoras.

Para estos aprovechados:  ¡Malditos asesinos!
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miércoles, 10 de febrero de 2010

Qué ‘bonita’ ironía

Voy a iniciar este ingreso, cual académico viejito:  “Antes de referirse al alcance que hemos de darle al objeto de estudio, debemos primero definir el vocablo “ironía”.  Algunos osados, más adelante dijeron que no era correcto hablar de definición sino de concepto.  Por mi parte, prefiero que elijan ustedes… simplemente he de decir que me referiré a la ironía, antes de abordar el tema central del día.

Para quienes gustan de metodologías clásicas, he de señalar que el Diccionario de la Real Academia de la Lengua Española define ironía así, para los efectos que nos interesa:  “3.  Figura retórica que en dar a entender lo contrario de lo que se dice.”

Para quienes gustan de explicaciones un poco más audaces, remontémonos a la reconocida filósofa Alanis Morissette, quien en su reconocido opus titulado “Ironic”, nos explica a través del ejemplo.  Recordemos un fragmento de su composición:

Citar
It's a traffic jam when you're already late
(Es un trancón (embotellamiento) cuando ya vas tarde)
It's a no-smoking sign on your cigarette break
(Es una señal de no fumar en tu receso de cigarillo)
It's like ten thousand spoons when all you need is a knife
(Es como diez mil cucharas cuando todo lo que necesitas es un cuchillo)

Ayer recordé mucho a esta filósofa cuando leí la columna de Aura Lucía Mera titulado “Mordaza planetaria” en El Espectador.  Seguro que si ella hubiera conocido el ejemplo antes de haber escrito la canción, lo habría incluido al principio.  Veamos un poco el ejemplo mediante una enunciación de hechos.  Sin embargo, con dolo directo (como dirían los penalistas) me propongo presentarlos de manera desordenada, para que el razonamiento quede a cargo de los respetados lectores de este espacio.  Voy a suponer que se trata de una demanda a presentar ante la ‘justicia’ colombiana, pero si pidiera a gritos que me la inadmitieran.  Ahí va:

HECHOS

1) El 09 de Febrero fue el día  del periodista.
2)  La Revista Cambio, en adelante se tratará de un medio que tratará temas de viajes, belleza, salud, y temas afines.
3)  La Comisión Nacional de Televisión en encuentra en proceso de adjudicación del tercer canal de televisión nacional.
4)  El día 03 de Febrero las directivas de la Casa Editorial El Tiempo anunciaron el cierre de la Revista Cambio como medio investigativo y de denuncia.
5)  La Casa Editorial El Tiempo tiene como socio mayoritario al grupo empresarial español Planeta.
6)  La Sociedad Interamericana de Prensa, ha sido pilar fundamental en la lucha contra la censura y en la promoción de la libertad de prensa.
7)  En el año 2009, la Revista Cambio se destacó por ser una publicación cuyas investigaciones destaparon grandes escándalos de connotación nacional.
8)  La Comisión Nacional de Televisión se encuentra en proceso de adjudicación del tercer canal de televisión nacional.
9)  El diario El Tiempo, primer negocio de lo que hoy es la CEET (Casa Editorial El Tiempo), fue fundado como un periódico de ideología liberal.
10)  Hasta hace unas semanas, de tres proponentes que inicialmente estaban en la contienda por la adjudicación del canal, renunciaron dos de ellos alegando falta de garantías y favoritismos.
11)  La Revista Cambio le generó utilidades a la CEET  en la vigencia 2009.
12)  La propuesta que finalmente quedó luego del retiro de dos competidores, era la presentada por el grupo  Planeta.
13)  Importantes medios de comunicación han hecho referencia al cierre de la revista, pero El Tiempo no responde a las críticas.
14)  El diario El Tiempo sostiene que sigue siendo un periódico de ideología liberal.
15)  Muchos dirigentes políticos colombianos de marcada ideología liberal, a lo largo de la Historia, se dieron a conocer a través del diario El Tiempo.
16)  Hace algunos meses, la columnista Claudia López fue retirada del diario El Tiempo, por criticar algunos métodos seguidos al interior del diario.
17)  En un momento dado, la Ministra de Comunicaciones (hoy TIC’s) indicó que era inviable adjudicar el tercer canal de televisión con un solo proponente.  Cuando la situación fue así respecto del grupo Planeta, cambió de postura y señaló que era perfectamente viable la adjudicación.
18)  Rodrigo Pardo, antiguo Director de la Revista Cambio, fue despedido, junto con María Elvira Samper, la editora general de la revista.  Esto se dio cuando se anunciaron los cambios al interior de la denuncia.
19)  La Casa Editorial El Tiempo alega que no posee intereses políticos que hayan motivado los cambios al interior de la Revista Cambio.  Alega únicamente consideraciones de tipo económico.
20)  En el año 2009, Enrique Santos Calderón, exdirector del diario El Tiempo, y hoy columnista de la misma publicación, fue Presidente de la Sociedad Interamericana de Prensa.
21)  Días después del anuncio del cierre de la Revista Cambio como medio investigativo y de denuncia, el Gobierno ha expresado que sigue luchando por la promoción de la prensa libre.


Qué ‘bonita’ ironía.  Espero no tener que explicar más, pero si aún así se requiere, con gusto profundizaré.
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sábado, 6 de febrero de 2010

Sobre la hipocresía judicial

Confieso que cada día que pasa me fastidia más saber que los jueces se volvieron políticos.  Perdón… Reformulo la idea:  confieso que cada día que pasa me fastidia más saber que los jueces aceptaron que son políticos.  Afortunadamente hace un par de días recordé lo que es sentir esperanza, cuando conocí que la ponencia del Magistrado Humberto Sierra Porto respecto de la ley que convoca al referendo reeleccionista.  Tengo entendido, por comentarios que he podido leer, que está bien argumentada.  Independientemente de que gane o no su postura al momento de debatir su ponencia, claramente se observa que no todo está perdido en materia de justicia.

Pasado el agradable efecto de la noticia sobre la ponencia de Sierra Porto, recordé el ingreso de Gonzalo Ramírez Cleves sobre el debate que se dio en la Universidad de Princeton, sobre los medios de comunicación y la Corte Suprema de ese país.  Revisé el debate gracias al enlace que se encuentra en esa entrada, y me sorprendí con la franqueza que manejan los periodistas que cubren la Corte de ese país, en cuanto al carácter político de la Corte y de sus decisiones.  De hecho, a algunos de ellos les parecía altamente deseable que así fuera.

Hace pocos días, en una entrada de Gustavo Arballo sobre el fallo “Citizens United” de la ya mencionada Corte Suprema de Estados Unidos, el blawger argentino inserta un video de Youtube que corresponde a un aparte del “Discurso del estado de la Unión” que pronunciara Barack Obama hace algunos días.  En el aparte específico que se observa en el video, se escucha a Obama criticar la referenciada decisión de la Corte Suprema, que a su sentir, conlleva grandes riesgos en materia de financiación de campañas electorales.  Allí, se observa a Justice Alito altamente molesto por la afirmación del Presidente, mientras los demás Justices simplemente se limitan a mirar en silencio al horizonte, mientras los demás asistentes ovacionaban al Presidente.

Otro reconocimiento de la relación entre política y justicia en los Estados Unidos.  Me imagino que esto sería un banquete visual para los neoconstitucionalistas de aquí y de allá.  Revisados conjuntamente los dos ingresos a los que he hecho referencia, no cabe duda que el pueblo norteamericano es conciente del componente político de su justicia, y se encuentra muy conforme con ello.  Es un asunto propio del país del norte, y si se encuentran cómodos los ciudadanos norteamericanos, es fabuloso.  Lo que más meritorio me parece, es que salvo casos concretos de apología a la aplicación rigurosa y desapasionada del derecho –como  le ocurrió a Justice Sotomayor recientemente–  los noreteamericanos son muy sinceros en cuanto al rol político de la Corte.

Volviendo a este lado del globo, en Colombia, observo que somos unos verdaderos maestros de la hipocresía.  Cómo me gustaría que se impusiera la moda de la ‘política de frente’, como ha ocurrido en casos como el de Estados Unidos, Brasil y Chile (por mencionar de países del continente Americano) donde en gran medida, se hace lo que se dice, y no se asume una actitud de burla crónica a la ciudadanía.  Aquí es diferente.  El Presidente se burla del pueblo.  Ahora con el supuesto interés de los partidos por la renovación del Congreso, pero poniendo en sus listas a los mismos cuestionados que ya están,  podemos reconfirmar, que los partidos políticos se siguen burlando del pueblo.  Pero ahora agreguémosle el hecho de que la Corte Suprema de Justicia, quiere burlarse más que los demás.

El día de ayer, en el diario El Espectador, encontré esta nota titulada “Sin humo blanco para nuevo Fiscal”, que inicialmente pensé que era una exquisita nota de humor jurídico.  Siguiendo un poco más con la lectura debí necesariamente concluir que se trataba de una nota de humor negro jurídico, y tras finalizar, me tuve que contentar con la conclusión de que es una nota de ingenioso humor negro jurídico.  Particularmente, me pareció notable la frase que a continuación cito, que sería digna de Groucho Marx, o de Gómez Dávila.

(…) si bien el alto tribunal de justicia aceptó la viabilidad de la terna, a la hora de votar se impone el voto en blanco. En otras palabras, en el fondo los magistrados no parecen muy convencidos de la calidad de los candidatos.

Obsérvese con qué grado de precisión se puede ser tan contradictorio al exponer una idea, y más aún, obsérvese con qué finura la Corte Suprema de Justicia (causa eficiente de la nota) nos toma por ignorantes.  Considero importante adentrarme en esta bella nota de humor, intentando aportar mi humilde interpretación de la actitud de los ‘Honorables’, intentando revivir el proceso que ha culminado con la elaboración de este ingreso.

Tras cavilar durante algún tiempo, sólo pude llegar a dos posible opciones:  o los ‘Honorables’ son idiotas, o los ‘Honorables’ son políticos. Debo confesar con cierto grado de vergüenza, que me tardé algunos segundos de más en ponderar la respuesta, que en principio debiera ser tan obvia.  Sin embargo, llegué a la conclusión a la que probablemente llegaríamos todos, y que puede intuirse de los ejemplos expuestos al principio de este ingreso.

Algunas consideraciones que soportaron mi conclusión:


1)      Hace algunos meses se decía:  Voto en blanco = inviabilidad de la terna.  Hoy se dice: Voto en blanco ≠ inviabilidad.  Conclusión:  El voto en blanco = cualquier cosa.


2)      Inviabilidad de la terna equivale a decir que los candidatos no reúnen las calidades requeridas para ser elegibles para el cargo.


3)      Ahora se dice que sí las reúnen (viabilidad), pero que los Magistrados no están convencidos de la calidad de los candidatos.


4)      Voto en blanco es el ejercicio electoral por el cual se manifiesta que no se está conforme con ninguna de las opciones planteadas de manera concreta, o en otras palabras, que ninguna opción lo convence.

Resultado parcial del ejercicio:  Siendo lo anterior así, ante una terna viable, los Magistrados votan en blanco porque es inviable.

Hasta ahí, más de un lector probablemente podría afirmar que me equivoqué al descartar la idiocia.  Todo parece indicar que es opción sería la ganadora indiscutida.  No obstante, vamos a cambiar el ejercicio, sustituyendo una constante del anterior razonamiento para ver por qué opté por la segunda opción.

a.  Hace algunos meses se decía:  Voto en blanco = inviabilidad de la terna.  Hoy se ‘asume’ : Voto en blanco = inviabilidad.  Conclusión:  Estamos partiendo de un supuesto erróneo.

b.  El voto en blanco no necesariamente implica que no se está a gusto con alguno o alguno de los candidatos.  El voto en blanco puede significar, entre otras cosas, que no es el momento para elegir y que quieren postergarlo.

c.  La Corte Suprema de Justicia siempre ha visto la votación como el ejercicio para elegir al Fiscal General de Uribe, y no al Fiscal General de la Nación.

Jugando un poco a la futurología, me atrevo a pronosticar que la suerte del Fiscal se conocerá cuando se tenga certeza sobre la suerte del referendo reeleccionista.  ¿Por qué? Porque solo entonces podrán los ‘Honorables’ saber qué tanta fuerza política seguiría amasando el Presidente, dependiendo de quien resultara elegido.  Si Uribe no puede aspirar, se podría elegir al candidato más uribista de todos si se quisiese, sin temor de que esto implique más acaparamiento de poder por parte del actual Presidente de la República.  Si Uribe sí puede aspirar a un tercer mandato, probablemente eligirán al menos uribista, por los mismos motivos, así no sea el que más les guste.  Es un juego de poder político.

Lo curioso del asunto, es que es esta la misma Corte que hace énfasis diariamente en que la Justicia es una rama independiente, cuyas decisiones solo tienen como fundamento el apego a la Constitución y la ley.  Si ellos creyeran realmente que esto es así, ¿qué importaría para efectos de la justicia que el Fiscal sea o no uribista? La justicia es apolítica, y por tanto, importaría un bledo qué tendencia política tiene el Fiscal.  La Corte, de manera hipócrita, niega que es una corporación con poder político y que sus miembros tienen apetito político.  Como sabe que lo es, y que lo mismo ocurre con la Fiscalía General de la Nación, prefiere seguir engañando un rato más al pueblo, con temas de viabilidades e inviabilidades, para que sigamos escribiendo notas como la de El Espectador.

Por supuesto, no se sorprendan cuando en algún momento dado elijan a alguien, y mencionen la manera como sopesaron las calidades jurídicas de los candidatos, y eligieron al mejor, cumpliendo con su deber constitucional.

Eso respetados lectores, es hipocresía judicial.  Sigan, señores Magistrados, siempre siendo así de ‘Honorables’.
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lunes, 1 de febrero de 2010

A vuelo de Gaviota – Ed. 1

El día de hoy, inauguramos una nueva modalidad de entrada, que busca tocar ciertos temas que interesan al contenido temático del blog, ‘a vuelo de pájaro’, o mejor, a vuelo de Gaviota: es decir, con breves comentarios.  Junto con los ‘Alazos’, esperamos que esta modalidad de ingresos sea del agrado de ustedes, y que siga poniéndonos a pensar, que es la finalidad principal.

A.  Cambio de brindis

Ante el evidente aumento en el impuesto a la cerveza y la amable invitación a utilizar las cesantías para gastos en salud, conviene cambiar el brindis habitual.  Ante tanta “salud”, conviene cambiar nuestro deseo y antes de sucumbir ante Dionisio, pedir un poco de “decencia”.

B.  La crisis de los 'pudientes' según Matador



C.  Ungar, la renovación y la vigilancia

Antes, en Congreso Visible, Ungar abogaba por la renovación y ofrecía su viglancia.  Luego, aún en Elección Visible, abogaba por la renovación y ofrecía su vigilancia.  En cambos casos no hubo renovación y no se vigiló mucho.  Ahora en la Corporación Transparencia, vuelve y aboga por la renovación y ofrece su vigilancia.  ¿Será que podríamos nosotros rogar por la renovación de los que piden la renovación, o pedir que se vigile a los que vigilan?

D.  Betto - POS



E.  A alguien le empezaron a funcionar las uvas…

Uvas y agüeros:  31 de Diciembre fervoroso.  Uvas y ríos de plata.  A alguien le empiezan a servir.  ¿Sería el cambio de latitud?  Esperamos confirmación de que todo ya está consumado.  Muchas felicitaciones.  Uvas y agüeros.

F.  Zona Escolar según Bacteria



G.  ¿Y el gusto colombiano por los Kennedy?

Nos gustan mucho los Kennedy.  Creamos un barrio en honor a JFK.  Nos gustó tanto que ahora tenemos una localidad.  Nuestros periódicos lloraron el reciente fallecimiento de Ted Kennedy.  Ahora, que tenemos a Justice Anthony Kennedy causando estragos en la Corte de Estados Unidos por sus posturas independientes e impredecibles, por los debates jurídicos que suscita, ¿por qué este Kennedy no les gusta tanto a los ‘juristas’ locales como nos han gustado los otros?

H.  Fallando en Gadejo

Nuestro jet set judicial está conmocionado con lo que será el próximo capítulo del reality “Fallando en Gadejo”.  Por ahora el combo “Suprema” está dividido.  Al mejor estilo del “Señor de las moscas”, hay involución, hay luchas de poder, y el orden establecido pasa a un segundo lugar.  El combo “Constitucional” está por refrendar el referendo, pero manteniendo el suspenso, que mejora el rating.  Por su parte, el Consejo de Estado sigue produciendo excelentes candidatos a Fiscales y a Procuradores, pero siguen teniendo problemas en ponerse de acuerdo entre ellos.
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