domingo, 30 de agosto de 2009

Alazos – Ed. 003: Especial UNASUR

La reunión de UNASUR ha terminado. Las reacciones se han podido conocer, y culminados estos espacios, procedo a emitir mis opiniones sobre varios aspectos que rodearon el encuentro de mandatarios suramericanos.

1. Sobre los Mandatarios NO colombianos

En el mes de junio de este año, escribí un ingreso dedicado a la interpretación que se le ha dado al término ‘mandatario’, dentro de un contexto nacional, y partiendo del presupuesto de la reelección. Al revisar la reunión de UNASUR, lo hice partiendo de una postura neutral, es decir, lo abordé como un tercero ajeno a la discusión, que parte de un problema, revisa argumentos y decide adoptar una postura, como consecuencia del ejercicio de argumentación.

Al revisar las presentaciones, pude concluir lo siguiente:

‘Lula’ y Bachelet, sin duda están en un grupo aparte. Respecto del primero, la claridad sobre los puntos de la discusión, y su apego a las reglas de juego, es algo que debe abonársele. Después de 7 horas de reunión, siempre tuvo claro por qué estaban allí, cuales eran los intereses de su país, y cuál era el objetivo último a alcanzar. De hecho, en una airada intervención al final de la reunión, formuló un regaño a todos los presentes, con firmeza, pero con respeto. Su regaño final, claramente justificado, se encontró con el resignado silencio de los demás, y un pequeño intento de ‘pataleo’ por parte de Rafael Correa. Verdaderamente es un líder mundial, y es perfectamente explicable por qué ha logrado darle ese nivel de transformación a Brasil en tan poco tiempo.

En cuanto a Bachelet, me impresionó su entereza, revestida de cordialidad. Sus intervenciones, sus preguntas, sus observaciones siempre fueron precisas y con una finalidad clara y útil. Cuestionamientos serios, siempre se mantuvo dentro del marco de la discusión, y no aprovechó para lanzar dardos o cuñas adicionales. Eso es un Jefe de Estado, o al menos, eso debería ser. Entre más escucho a la Presidenta Bachelet, más me impresiona. Esa seriedad y consecuencia permite entender por qué la crisis económica fue prevista, absorbida y superada con tanta solvencia por parte de los chilenos. Sin duda, este par está pensando y reflexionando en un plano diferente a los demás.

En cuanto a los que me gustaron, incluyo a Alan García, y a Correa. El primero, a pesar de no estar directamente en la mitad del conflicto, acudió a argumentos históricos, dejó sentadas sus posturas con absoluta claridad, y fue independiente. En Colombia, creen que el país ha perdido a un aliado. Personalmente, considero que la posición de Alan García ha sido absolutamente sensata, y seria. ¿Cómo condenar sin saber? ¿Cómo apoyar sin saber? Investiguemos, y de paso, construyamos integración del continente. Me pareció un mensaje extraordinario. Por mi parte, considero que los comentarios dirigidos a Chávez y Uribe fueron recursos para solicitar consecuencia discursiva a ambos, de una parte por el odio político hacia el gran comprador del petróleo venezolano. Respecto del segundo, ¿cómo el luchador por la defensa contra la violencia va a negarle las preocupaciones de defensa a quienes manifiestan exactamente las mismas preocupaciones?

Me gustó mucho la presentación de Correa. A diferencia de otros colegas bloggers, yo no lo etiqueto como servil a Chávez, ni como peón de nadie, y por el contrario, considero que ha sido un Presidente muy competente para su país. El problema es que no quiere al gobierno colombiano. Sin embargo, su preparación académica y su estructura –derivada de la primera– no debe desconocerse. Hacerlo es una necedad. Discutir con las cifras, es muy diferente que discutir con el mensajero, y creo que Rafael Correa logró argumentar y dejar sentado un muy buen punto. Lastimosamente, en varias ocasiones se evidenció que le hablaba a su población y no a sus colegas.

Respecto de los demás, me parecieron interesantes intervenciones, por regla general. Sí afirmo que dieron mucho pesar las intervenciones de Evo Morales, y de Cristina Fernández de Kirchner. El primero de ellos se dio a la tarea de jugar al sofisma en su última intervención, y eso NO se hace en una reunión de Jefes de Estado. En cuanto a la señora Fernández (a quien algunos llaman K.) creo que su intento por mediar fue desastroso. El inicio de su intervención parecía interesante, con aquello de sentar doctrina respecto del problema. Sin embargo, el recurso de acudir a ‘ejemplos en abstracto’ que no eran abstractos, fue el inicio de una intervención desastrosa. En efecto, lo anteriormente mencionado no proponía nada diferente de lo que ya habían mencionado los demás, pero agregando el lanzamiento de dardos injustificados en ese momento de la discusión.

A Ronald Venetiaan hubiera sido interesante escucharlo, pero la traducción no ayudó. Tabaré Vásquez y Lugo intervinieron muy poco, y respecto de Chávez, ya sabemos que el en esta clase de reuniones es otro personaje completamente diferente al que normalmente es en Venezuela.

2. Sobre el Presidente Uribe

Uribe cuenta con una cualidad que debo reconocer, y es saber escuchar a todos los presentes, amigos o contradictores. La posibilidad de responder a cada una de las intervenciones de los demás, implica que al menos formalmente, las palabras de los demás no han quedado en el aire. Cuando se buscan consensos, soluciones de conflicto e integración, esto es fundamental.

En segundo lugar, entiendo un poco, después de haber escuchado a Uribe, por qué en parte cuenta con los inexplicables apoyos que maneja en Colombia. Fue sincero y frentero con los demás, y aceptó las duras críticas que le presentaron sus colegas, con entereza. Esa dignidad con la que asumió el reto el actual Presidente, era la dignidad de la que carecían sus antecesores, y es la dignidad que le falta a la inmensa mayoría de los precandidatos presidenciales actuales. Mientras estos últimos solo dan la pelea ante vientos favorables, Uribe se fue a que lo acribillaran, y lo hizo con entereza.

Plus: Logró que el texto fuera mucho más favorable para Colombia, de lo que fue la reunión.

Contra: Sus intervenciones extensas, hubieran podido ser, y debieron ser mucho más concretas. Habla demasiado despacio, y eso propicia que no se capte enteramente las ideas a transmitir.

3. Picotazo al derecho internacional

Siempre he sostenido la postura de que el derecho internacional no sirve para nada. Cuando hago referencia a que no sirve para nada, quiero decir que considero realmente que no sirve para casi nada. Sin duda, hay cuestiones útiles, pero en términos generales considero que el derecho internacional no funciona. Después de tantas horas de reunión, se redactó un documento en media hora, en el que quedaron consignadas una cantidad de cuestiones que no se discutieron, y se dejaron de lado otras tantas que sí fueron discutidas.

En unos meses, no estaremos revisando las grabaciones de la reunión para saber qué ha decidido UNASUR. Lo realmente vinculante son las decisiones y sus resoluciones. Decisiones y resoluciones que son mentirosas frente a la realidad de lo debatido, no servirá de mucho.

Por supuesto, me dirán algunos, estas reuniones no producen normas jurídicas a aplicar por los estados miembros. Son de contenido político, y a ese marco se restringen. Igual ocurre con los famosos G’s, así ocurre con las decisiones de la ONU, y de la OEA. Si la posición de sentar doctrina de UNASUR quiere lograrse, sería importante que luego de debatir, los miembros se tomaran un pequeño espacio de tiempo para redactar, y luego algún espacio de tiempo más para revisar el tema. Claro, vendrán más reuniones, pero si se manejan por el mismo estilo, no sabremos muy bien lo que ocurra. El mismo problema se ha presentado en otras oportunidades, de las que cabe destacar la preparación y aprobación del Estatuto de la Corte Penal Internacional, donde también se logró una aprobación express.

Textos así, no sirven, ni servirán para nada, y tal vez por ello, es que, como lo mencionaba Rafael Correa, a pesar de lo que diga la ONU, Estados Unidos hace lo que quiere. Tal vez por eso es que a pesar de que se presentan situaciones como las de Rusia, Georgia y Osetia del Sur, seguimos igual. Tal vez por ello es que Kim Jong se ha cansado de lanzar misiles por el mundo. Quizás Irán escuche el llamado de atención número 100 que le realicen sobre temas nucleares. “La número 100 es la vencida”. ¿Le importó a Uribe que algunos países rechazaron de plano el tema de las bases? Tal vez sí, pero él habla en pasado y no en presente.

4. Prensa

Afortunadamente en algún momento de mi paso por la universidad, a algún profesor de asuntos procesales se le ocurrió hablar del principio de la inmediación, refiriéndose a que el juez debe acudir directamente (hoy diremos que en la medida de lo posible) a la fuente de la prueba. Sin duda, esta enseñanza fue útil para enfrentar esta reunión de Jefes de Estado. De lo contrario, habríamos quedado a merced de la prensa, cuya cobertura ha sido realmente lamentable. Por supuesto, se interesaron en las frases punzantes, en la foto final, y seguramente en el menú que les sirvieron a los asistentes. Análisis de fondo, muy poco, para nuestro pesar. Si le hubieran hecho caso a ‘Lula’, quién sabe qué versión habríamos tenido hoy de lo ocurrido.

5. Preguntas finales

¿Qué haría Chávez si hubiera nacido en la época de la independencia? ¿A quiénes citaría? En la actualidad se le están acabando las citas de sus próceres favoritos. Teniendo en cuenta su proyecto de reelección indefinida, quién sabe con qué nuevos próceres nos sorprenderá más adelante. Creo que se le están agotando los recursos.
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jueves, 27 de agosto de 2009

Sobre “El Legislador”

Recuerdo que en los primeros meses del año 2001, acudí a una charla que se dictó en la universidad, sobre algunas cuestiones relacionadas con la política nacional, seguridad, y economía. El gran invitado en esa ocasión fue el candidato a la presidencia, un paisa de apellido Uribe. El hombre con sonrisa forzada, con una cierta timidez infantil que lo etiquetaba como sincero y correcto, se dirigió a nosotros con total naturalidad, claridad en su forma de expresarse, y con ideas que en ese entonces parecían acordes con el clamor de la población.

En ese entonces, Colombia era un país con un déficit fiscal enorme (¡vaya novedad!), con un pueblo acorralado en las ciudades principales por la inocultable presión de la guerrilla, y con un Presidente que cada cierto tiempo decidía que era bueno venir a visitar el país con alguna regularidad, para efectos de que su cara la recordaran, aunque fuera sus propios ministros.

Recuerdo que ese paisita me cautivó en ese entonces con tres ideas sencillas, como sacadas de la mente de un librito de lógica: presencia del Estado para brindar seguridad, reducción de gasto del Estado para frenar el déficit, y cero ‘politiquería’. Parecía que hubiera leído algo de los primeros capítulos del libro de Vladimiro Naranjo Mesa, titulado Teoría constitucional e instituciones políticas. Me convertí en un fiel seguidor. El hombre poseía algunas ideas no muy atrayentes en materia de salud, educación y economía, pero su consistencia en la defensa de las tres propuestas recién mencionadas lo hicieron muy llamativo en ese momento, en los que el hombre todavía no era oficialmente candidato a nada.

Ese mismo señor, casi 4 años después, decidió promover algo que no era siquiera objeto de discusión en los foros académicos, la reelección inmediata del Presidente de la República. Yo seguía contento con el hombre porque había logrado varias de las cosas que había propuesto. Incluso se metió en la loca idea de un referendo para luchar contra la corrupción y la ‘politiquería’. Lo perdió por ingenuo y por errores de cálculo, pero realmente en ese momento había realizado un ejercicio interesante. Había fusionado algunas entidades para reencauzar el gasto público, dándole prioridad a la defensa. Era consistente con lo que había dicho en el 2001.

Ese era el estado de cosas cuando se empezó a discutir el tema de la reelección presidencial. Siempre he sido partidario de la posibilidad de una reelección inmediata. La idea de poder darle continuidad a políticas de largo plazo de una persona que haya podido demostrar resultados en las políticas de corto y mediano plazo, me resulta lógica. El asunto adquirió cierto aire de fetidez cuando observé que la discusión al interior del Congreso era tan superficial y sencilla, como determinar si Uribe debía seguir o no. Esperaba con ansias que aquella corporación a la que me ensañaron a llamar “el legislador” se sacudiera y empezara a mostrar aquello que durante un buen tiempo venía estudiando. “El legislador es sabio”, “el legislador realiza una cuidadosa tarea de ponderación, por etapas, que garantizan que los potenciales vicios son detectados y controlados por sí mismo”. En este caso, ‘el legislador’ era constituyente, y eso lo obligaba a ser doblemente sabio.

Ese superhombre al que los maestros llamaban ‘el legislador’ no se sacudió. Se modificó la Constitución y se permitió la reelección inmediata. La Corte Constitucional aprovechó para analizar el asunto, soltar un discurso sobre la Carta Política y darle su aprobación al asunto. No era el procedimiento que hubiera esperado, pero el resultado no me desagradaba in abstacto. Algún tiempo después pude comprender cuál fue la metodología seguida por algunos componentes de ese superhombre. Aparentemente hubo un par de traidores que se habían ofertado, cuales prostitutas, al mejor postor. Sin duda esto ya mostraba fetidez. No parecía existir mucha diferencia entre eso y la ‘politiquería’ que había jurado vencer el ahora Presidente.

Vuelvo a saltar en el tiempo, y veo que, algunas condenas penales después, actualmente nos encontramos en una situación tragicómica. Uno de los acérrimos críticos de la primera reelección es ahora el abanderado número uno de la segunda reelección. Un verdadero amigo de la seguridad democrática, es su forma de autodefinirse. Tenemos un Ministro del Interior que ha sido reconocido de larga data por ser uno de los seres más ‘politiqueros’ (por acuñar un término que el paisita usaba y que ya no usa) al mando de la interacción con ‘el legislador’.

Me encuentro con que el gobierno supo ahorrar en estos dos periodos los suficientes puestos públicos, para poder inyectar a la economía en un momento en los que se requiere dar un empujoncito a la economía. ‘El legislador’ es tan sabio que sabrá manejar adecuadamente el efecto multiplicador. Es esta, y no ninguna otra consideración, la que lleve a que se ‘persuada’ a un órgano autónomo. El Ministro declara que el gobierno es respetuoso de la autonomía del legislador, así como la de la Rama Judicial, pero siempre que no implique cambiar ternas para fiscales, o para Magistrados, o para nada. Los servidores públicos han aprendido a no hacer tratos ocultos con parlamentarios, así que en su sabiduría, ‘el legislador’ ha entendido que debe aplicar el principio de la transparencia en sus negociaciones. Así lo ha hecho. Ya sabemos por cuantas notarías se está ‘concursando’, cómo funciona el proceso de restructuración del SENA, y hacia donde quiere mirar la Procuraduría. Evidentemente, para el público es claro cómo funciona el tema.

El asunto ha adquirido matices poéticos, con encrucijadas del alma, con historias de amores y odios entre pueblos hermanos, con rumores de traición y anuncios de un porvenir mejor. Este guión ha sido magistralmente escrito. La corrupción está siendo encauzada a sus justas proporciones, tal y como me lo comentaba un profesor en la mañana de hoy. Seguramente esa ponderación del ‘legislador’ es la que el pueblo añora y aplaude. Por eso, la mitad de la población nacional está de acuerdo con que se haya aplicado el principio de transparencia. Los otros, simplemente somos malos perdedores, y de paso, amigos de terroristas.

Ya vamos por un muy buen camino. Si ‘el legislador’ ha optado por esta responsable vía jurídica, ya podemos pensar en entrar en un sistema parlamentario, como lo señalaba ‘el hombre que puso a pensar al país’ hace no mucho tiempo. Ese legislador es ‘un berraco’. No tan berraco como el Leviatán, al que nos hacía referencia el profesor Gonzalo Ramírez por estos días, y ese a su vez, no tan ‘berraco’ como el paisita, pero casi. Sin duda, todos lograremos salir de encrucijadas, pronto. Por eso, seguramente era que el profesor amigo me reiteraba hoy que como abogado, nunca debería perder la fe en el derecho. Ponderaré mi apresurada y sin duda injustificada respuesta: “Yo la fe en el derecho la he perdido toda. Mi esperanza radica en la fe que le tengo a la justicia”. Sin duda fue apresurado y tonto de mi parte. El derecho es resultado de un diálogo serio de los asociados, y la interconexión del ser con el deber ser. Lo demás son calumnias.

NOTA DE LA GAVIOTA: Agradezco, a quienes hasta ahora se adentran en este blog, que no confundan la justicia con la administración de justicia. Respecto de la segunda, he expresado TOOODA la fe que le tengo, en ingresos anteriores.
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lunes, 24 de agosto de 2009

Sobre el 1er Encuentro de Blawgers – Parte 4

Advertencia:

Querido diario, poseo síndrome de abstinencia. Han sido demasiados días de gratitud, de ‘picos’, de alegría y camaradería. ¿Qué pasó con la idea de los picotazos? Mi alter ego, sin duda, estará orgulloso de haber podido, al menos por unos días, cambiar a la Gaviota por una palomita de la paz. Hoy verás la lucha intestina que se genera al encontrar que no alcancé a convertirme 100% en esa palomita de la paz. Sé que en el ingreso de hoy resulta indispensable dar un par de picotazos, pero de cariño. Haciendo referencia al aprendizaje (uno de los puntos clave del Encuentro), utilizaré el viejo recurso aprendido en mi época de niñez. Hoy recurriré a la frase de nuestros padres: “Créeme que me dolió más a mí que a ti”.

Moraleja aprendida:

Mi amiga, la bitácora, he aprendido que tú y yo hemos sido tácitamente derogados. Pensé que cuando conversábamos amenamente en el pasado, te mostraba caricaturas y componía algunas estrofas jurídicas para intentar expresar lo que siento en el único lenguaje que sé, éramos la muestra de que el futuro estaba en nuestro presente. Luego de tres días de ponencias, me encuentro que nuestra famosa web 2.0 (término que no te habías dignado a compartir conmigo), aquél que nos permite ser blog y blogger respectivamente, está revaluada. Al menos, muchos dicen eso. Ahora, valiéndome de mi calidad de ave, no habrá mucho problema en ingresar al mundo del Twitter, cantando y silbando como todo un microblogger. Es probable que no de el salto, y por lo tanto, seguiremos tu y yo redecorando nuestra casita virtual. No obstante, es importante que entiendas, como lo hice yo, que estamos derogados.

Obligaciones por naturaleza y el riesgo:

Alguna vez aprendí en la universidad, que en materia de obligaciones y contratos el contratista no solo está ligado a la obligación principal prevista por las estipulaciones de los contratistas, sino que está igualmente debe acreditar el cumplimiento de aquellas obligaciones que surgen de la naturaleza del contrato. Esto último lo recordé específicamente cuando tratamos el tema de cómo ser un buen ciudadano digital. La utilización de contenidos ajenos, la responsabilidad patrimonial y penal que pudiese configurarse por el contenido de un ingreso, o por algunos comentarios de lectores, son elementos que necesariamente un blogger debe tener en cuenta, y más aún si el blogger es un blawger.

Precisamente, respecto de ese tema, conviene analizar si el blogger es un generador de riesgo. La inquietud surge porque las modernas teorías de responsabilidad civil y responsabilidad penal tienden a sancionar a quien crea un riesgo, o se aprovecha de él, cuando dicho riesgo genera daños a terceros. La imputación al tipo objetivo –que gusta tanto a los académicos colombianos, porque antes le gustó a los españoles, porque a su vez antes le gustó a los alemanes– parte de la generación de riesgos jurídicamente desaprobados. La responsabilidad por actividades peligrosas, ya en el ámbito civil, hace referencia a que se responde por no haber ejercido debidamente la función como guardián de un determinado riesgo.

¿Escribir un blog constituye simplemente un derecho a expresarme? El encuentro ha dejado claro que no es así. Internacionalmente, ya se ha visto el alcance que puede llegar a tener el blogger, por el nombre del espacio, por el contenido, por los comentarios e incluso por enlaces en el espacio. Sin duda, escribir se ha vuelto un tema riesgoso, querido diario, no solo por los adefesios ortográficos que puedo uno soltar en la blogósfera, sino también por el alcance de las ideas que puedes transmitir. Creo tan solo sensato, que debemos empezar a prevenir desastres, y no confiar en la ineficiencia o simple desinterés de las autoridades locales. Finalmente, estamos en un país (al menos físicamente) en donde la responsabilidad, sea personal o social, constituye un eje orientador de nuestra forma de Estado.

No obstante, y a pesar de las advertencias que han venido realizando los conocedores en el tema, encuentro que realmente somos muy pocos los que nos hemos preparado para esta clase de contingencias. De hecho, era yo uno de los primeros en no tener ninguna de las salvaguardas recomendadas. Vamos avanzando poco a poco. Gracias a Dios, tengo una audiencia escasa, pero respetuosa y decente. No he debido afrontar ningún percance de índole jurídico. Sin embargo, ya iniciamos la gestión. Como verás, querido diario, he empezado a cambiar algunas cosas en tu apariencia. Ya no pareces un blog de los 70´s, sino casi un blog de los 90´s. Ya contamos con una licencia de Creative Commons para que nuestros lectores sepan que pueden compartir estas líneas, pero bajo ciertas condiciones que podrán conocer, como lo hice yo, al leer la licencia 2.5. Trabajaré más adelante en un bonito disclaimer o aviso de advertencia, para que nuestros visitantes sepan que no pueden escribir en ti. Va un picotazo a los blawgers, que como yo en el pasado, no han venido dando ejemplo en ese sentido.

Blogs: Aprendizaje y enseñanza:

Muchos de quienes fuimos ponentes, apreciada bitácora, hemos presentado nuestras teorías sobre la relación de blogs y la enseñanza del derecho. Personalmente, cuando finalizó el encuentro, habiendo escuchado las presentaciones de Fragale, Bermúdez, y Ramírez Cleves (alias “El Parcero”, Pacho y el Rey del Spam) entendí que los blogs no sirven como elemento auxiliar para la enseñanza tradicional del Derecho. Si se mira desde la óptica que presenté yo en mi ponencia, encontramos blogs como los de Seminario de teoría constitucional y filosofía política, No hay derecho (No hubo derecho) y Saber leyes no es saber derecho, en los que el aprendizaje dialógico es un hecho. Sin embargo, si te das cuenta, son tres casos paradigmáticos, entre muchos blogs, y todos ellos son de autores argentinos.

Por supuesto, en Colombia es difícil, por cuanto no encontrarás muchas personas que les guste la discusión. Somos un país mayoritariamente compuesto de ególatras con afán de discursos y monólogos, y bajo ese entendido, los que discuten son los meros mortales, porque “yo ya sé”, pensamos la mayoría. Sin embargo, me queda la esperanza, después de algunas conversaciones sostenidas en el Encuentro, que algún día podría llegar a darse aquí también. De hecho, hoy en día se observan bonitas discusiones en blogs como los de Alejandro Gaviria (política y economía) e incluso en el blog de Diego Fernando Mejía en el Canal Speed (automovilismo – Juan Pablo Montoya). No todo está perdido. De pronto algún día los abogados colombianos caigamos en cuenta que somos casi doscientos mil tarjetas profesionales andando por ahí, y que el funcionamiento no es “Yo y otros 199,999”.

Como te dije, hay esperanza, pero es esperanza teórica. La verdad es que en estos momentos, la enseñanza y el aprendizaje en los blogs funciona respecto de los mismos bloggers, y lectores no bloggers. Al finalizar el encuentro, como te mencioné hace un rato, sentí que esto no funcionaba para enseñar derecho, al menos, no en Colombia. Sin embargo, luego de digerir la información, las diferentes experiencias y la realidad educativa en el país, he llegado a considerar que el sistema de aprendizaje a través de los blogs, funciona como debiera funcionar realmente el sistema de créditos, por el que se rige la educación superior en el país.

Recordarás que el fundamento de la educación por esta vía, es la posibilidad de que el estudiante pueda acceder al conocimiento que él quiere acceder, y bajo ese entendido, el profesor no es un proveedor de conocimiento, sino un guía que responde preguntas, propone lecturas y evalúa aprendizaje. La responsabilidad del aprendizaje recae directamente en el estudiante. Tal y como me lo comenta mi otro yo constantemente, el asunto se quedó en bonitas teorías, pero en la práctica no funciona así. En la blogósfera, en cambio, te encuentras tu con una serie de páginas especializadas en temas, en contenidos y en metodologías. Si quieres que te recomienden lecturas, fácilmente encontrarás varias páginas que lo hacen, o que incluso te proporcionan las lecturas. Si quieres conocer opiniones e interpretaciones, también encontrarás estas páginas. Si lo que buscas es análisis de jurisprudencia, lo tienes a un click de distancia. En consecuencia, no tienes TODO, pero sí tienes MUCHO. Si no funciona el blog como forma de enseñanza del derecho, es porque el lector no quiere que funcione. La información está allí, y simplemente hay que entrar a buscar. Si el navegador virtual es un dummy, en el término de ser un ser ávido por información, que no conoce todo pero quiere conocer más, el problema no es ser un dummy, sino no serlo. Es precisamente el dummy el que busca, el que averigua, el que aprende.

Asistencia:

Desde hace un año estemos realizando una convocatoria para que los bloggers nos reuniéramos a compartir, y departir, y a discutir. No puedo entender, ni justificar el hecho de que para las fechas del encuentro, fuimos realmente pocos los que permanecimos en el encuentro a lo largo de los tres días. Claro, querido diario, sin duda tu observación es acertada. Yo tampoco asistí a todo el evento. Es cierto. Pero hice todo lo posible por hacerlo. Como te conté antes, me coordinaron una reunión ‘cambia-vidas’ tan solo unas horas antes de iniciado el encuentro, y fue esa reunión la que me alteró la agenda. Por lo demás, todo estaba planificado para estar el 100% del tiempo allí, incluyendo ajiaco, cumpleaños, talleres, y demás.

Considero que el carácter formalista que se le dio al evento, despistó a quienes no debían de despistarse. Si bien el encuentro se realizó como un evento académico de la Universidad Externado, no implicaba ello que era una reunión de bloggers amigos, para discutir sobre unos temas propuestos mucho tiempo atrás. Hubo personas que literalmente dictaron su conferencia y desaparecieron del encuentro. Evidentemente, no incluyo aquí a los ponentes virtuales, a quienes les abono el esfuerzo y la paciencia (a muchos de ellos les tocó cambiar los horarios a última hora debido a los retrasos que sufríamos en Bogotá). No es importante dar aquí nombres. Cada uno sabe en qué grupo está.

Te recuerdo que la reunión precursora de este evento era el Beers N´ Blogs que se realizó en Argentina. Por razones de decoro y respeto con El Externado, no podía haber mucho beer en las aulas, pero la filosofía del encuentro era la misma. Sin embargo, el tema se desdibujó, y finalmente pareció como un congreso o seminario común y corriente, donde el ponente llegaba a la hora indicada, hablaba y se iba. Te repito: no comparto esto. Espero que para el próximo evento, podamos retomar la senda, y que los participantes REALMENTE participen.

Comentarios finales:

Por último, querido diario, antes de dejar atrás el tema del 1er Encuentro de Blawgers, conviene, para efectos de exorcizar malos espíritus, dejar sentadas las siguientes protestas:

1) No logré conseguir la escarapela de expositor. Error táctico de mi parte. Me quede sin el recordatorio.
2) Me quedé pendiente de las reuniones de viernes en la noche, y sábado por la mañana. ¿Se realizaron? Si me entero, te comento.
3) Y eso del libro, ¿cómo funciona?

Ya, querido diario. Creo que el sueño ahora sí podrá ser reparador. Gracias por tu tiempo.




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sábado, 22 de agosto de 2009

Sobre el 1er Encuentro de Blawgers – Parte 3

Día 3:

La historia se repitió, aunque por causas diferentes. Me refiero a no haber podido dormir mucho, aunque esta vez fue un asunto buscado. Una reunión el día anterior había llevado a que cometiéramos el error de probar aguardiente. Era aguardiente antioqueño, que es ‘el más rico’, o mejor ‘el menos feo’, para hablar con la verdad. No fue mucho lo que se consumió de ese brebaje, pero sí lo suficiente para que al día siguiente madrugara con cierto tufillo a cantina. Si hubiera sabido que ello ocurriría, cuando menos habría optado por embrutecerme en alcohol, algo que probablemente algunos colegas bloggers sí hicieron. Al menos habría justificado el sinsabor del viernes.

En esas condiciones debí acudir al DAS (Departamento Administrativo de Seguridad), para sacar el certificado de pasado judicial. En la reunión ‘cambia-vidas’ me habían exigido obtener uno de estos. Nunca antes lo había necesitado, así que era una experiencia nueva. Supongo que sería necesario demostrar que Gaviota Jurídica es además gaviota legal. Afortunadamente, no hubo sorpresas, ni muchos otros individuos que se llamaran Gaviota. No tuve que ser detenido e interrogado por horas para que se dieran cuenta que no me gusta mucho crear tertulias de extorsión.

Ya con el anhelado documento en el pico, opté por emigrar a tierras más elevadas y más frías. Por supuesto, en el camino sería indispensable detenerme por un tinto ‘cargado’, con miras a evitar una potencial crisis de cafeína a lo largo de la mañana. Te confieso, querido diario, que perdí la cuenta de cuántas veces había caminado por la misma calle empinada, intentando alcanzar el Bloque G de la Universidad Externado. En esta ocasión, ni las ganas ni el ímpetu permitieron que pudiera avanzar a un ritmo medianamente decente. Luego de un par de horas subiendo (en realidad no tengo claro cuánto tiempo fue, pero me pareció una eternidad) alcancé mi objetivo. Me encontré a la entrada con Carlos Javier Delgado. Lo saludé, y le pedí excusas, mientras buscaba afanosamente una silla para descansar un poco.

Me comentó que ese día el evento inició muy puntual. Claro, el primero de los ponentes era Néstor Osuna, el director del departamento de derecho constitucional en esa Universidad, y por cierto, el otro GRAN culpable de que el evento pudiese ser una realidad. A ese nivel, no es usual que se patrocine la impuntualidad, y en efecto, no lo hizo.

Tampoco tuve la oportunidad de escuchar a los blawgers venezolanos Emilia de León y Gilberto Andrea, a quienes me interesaba escuchar, teniendo en cuenta que algunos de los ingresos más polémicos que he tenido la oportunidad de leer en los blawgs, han sido publicados por ellos, y la gran mayoría de veces, suelo estar de acuerdo con lo que plantean. Lastimosamente, mientras salía del DAS, ellos presentaban su ponencia, y no alcancé a presenciar su exposición. No obstante, querido diario, hemos podido encontrar un ingreso en Blawggers Internacionales, el blog colectivo, en donde Emilia y Gilberto nos explican un poco de qué trató la exposición del Profesor Osuna, así como la de ellos dos. Más adelante, cuando termine de contarte mi historia, podremos entrar aquí para revisar juntos ese ingreso, y empaparnos del tema.

Juan Carlos Upegui, a quien tuve la oportunidad de conocer a lo largo del encuentro, fue quien continuó con su exposición, y esa también, me la perdí. Supongo que ese sería el momento en el que estaba precaviendo mi crisis de cafeína así como cuando inicié el ascenso por mi Vía Dolorosa. No tengo mayor referencia sobre el contenido de su ponencia, por lo que deberemos esperar a que se pueda publicar el libro del encuentro, ojalá…

Cuando ingresé al salón, Francisco Barbosa presentaba su ponencia desde Francia. Llegué al final de la presentación, y alcancé a escuchar unas respuestas que dio Francisco, antes de que finalizara, y se debiera otorgarle el uso de la palabra a Francisco Bermúdez Guerra, quien debía haber expuesto el jueves, pero por problemas de time management y algo de hambre, no había podido presentar su exposición.

Debo admitir que la ponencia de Francisco Bermúdez fue una de las que más disfruté, en términos generales. No fue la técnicamente más elaborada, ni tampoco contenía ningún secreto oculto, pero fue interesante conocer su posición sobre el porqué crear un blog jurídico, puesto que de los colombianos presentes, creo que el fue el primero en hacerlo. Habló del anonimato en la red, y como un dardo teledirigido a mí, mencionó que eso del anonimato “no existe”, y recordó su experiencia personal con un troll que ingresó a su blog simplemente con ganas de atacarlo. Todas esas experiencias, que quizás ya conocía de antemano por la cercanía que he tenido con ese blog desde que inicié en mi experiencia virtual, fueron amenas de revivir. Sin embargo, hubo un elemento que me llamó poderosamente la atención en cuanto a los destinatarios del contenido de los blogs. Francisco Bermúdez fue claro en señalar que la misión nuestra como bloggers es hacer que cada vez más personas tengan su blog. La razón, para él, es muy sencilla: “somos los bloggers los que leemos los blogs de los demás”. Los bloggers son los principales consumidores de la blogósfera, y en la medida en que se incremente el número de bloggers, se incrementará la comunidad, y por lo tanto, la retroalimentación tenderá a aumentar. Eso explica mucho por qué hace algún tiempo a Francisco se le ocurrió la loca idea de crear un blawg colectivo, al que hoy llamamos Blawggers Internacionales.

Finalizada la intervención de Francisco Bermúdez Guerra, era el turno de Carlos Javier Delgado, otro de los sacrificados del día anterior. De hecho, ellos dos formaban parte de la mesa en la que yo expuse. Su ponencia, sobre la relación de la ética hacker con la formación en Derecho, descubrió de qué manera la ética hacker en la red era fundamental para la constante evolución y avance del software, de las costumbres virtuales, y también para la actualización y aprendizaje en derecho. Los hackers, optimizadotes o los Jedi (según la anécdota que él trajo a colación), en la lucha contra los crackers, abusadores o Sith. En la mitad, estamos los demás. Fundamental señalar que su ponencia descubre dos elementos que comparto plenamente. El primero de ellos es que la ética hacker implica hacer, desarrollar, ayudar, y no simplemente pregonar buenas intenciones. Eso es contrario a lo que ocurre en las sociedades ‘reales’ actuales. En segundo lugar, el hacker es un individuo que, por característica de grupo, debe ser modesto, o al menos iniciar siendo modesto. No se trata de figurar y autodenominarse salvador, redentor o auxiliador. El hacker trabaja, ayuda y colabora, y son los demás los que lo ‘bautizan’ con el título de hacker. Evidentemente, me quedo corto en todo lo que él mencionó que era de gran utilidad, y será indispensable revisar su ponencia nuevamente, en la medida en podamos echar mano a ella. Definitivamente, tenemos nuestro propio Jedi en el grupo.

Finalizó la mesa, y estábamos, como cosa rara, muy por encima de los tiempos previstos. La decisión adoptada fue la de no dar receso, como sí había ocurrido los dos días anteriores. Era necesario continuar con el programa, porque cualquier percance en el día, no podría ser recuperado ningún otro día. El programa debía finalizar ese mismo día. Tomó la palabra el moderador, Mauricio Baquero, quien invitó a todos los ponentes a sentarse en una mesa adelante, y muy respetuosamente les advirtió que iba a ser exigente en materia de tiempo, para que se pudiese cumplir con la agenda. Dicho lo anterior, introdujo a Jhonny Pabón.

Para serte muy sincero, querido diario, no pude comprender debidamente la presentación de Jhonny. Sin duda, es una persona que domina el tema de propiedad intelectual en materia virtual. Sin embargo, creo que la excesiva rigurosidad en materia de tiempo lo obligó a cambiar su esquema. Su presentación, que contaba con ayuda de diapositivas que exponían sus ideas principales, era un resumen de aquella que inicialmente había planeado, según él mismo lo comentó. Fue una verdadera lástima que la restricción de tiempo nos privará de un más amplio desarrollo de su ponencia, que sin duda contenía todos los elementos técnico-jurídicos para ser bien reveladora.

La siguiente presentación de la mesa sobre Cómo ser un buen Ciudadano Digital correspondió a Alejandro Delgado, quien se adentró en cuestiones interesantes sobre el trasfondo legal de los blogs, y asuntos como la responsabilidad de los bloggers por contenido de los blogs, y contenido que terceros ingresan en el blog. Su presentación fue clara y sencilla. Debo aceptar que a partir de aquí empecé a sentirme un poco mal, porque la visión que plantean sobre un buen ciudadano digital, riñe un poco con la que he venido manejando yo. “Sin embargo”, pensé yo, “no he entrado al plano de delincuente digital”. Importante destacar el control jurisdiccional real en materia de blogs jurídicos, y cómo las viejas inquietudes sobre jurisdicción y competencia adquieren un relieve especial en este punto. Más adelante podemos revisar lo que fue la ponencia de Alejandro, en su página.

Vino luego la presentación de Mauricio Fino, quien nos acompañó a lo largo de todo el encuentro, y nos relató un poco sobre el tema de Creative Commons. Personalmente, creo que la presentación oral no fue la mejor. Sin embargo, debo reiterar que las ayudas elaboradas por Mauricio, y la claridad en la forma como se han ordenado, han sido absolutamente llamativas y claras. De hecho, después de un año de estar oyendo hablar de Copyleft, Creative Commons y otra serie de nombres bonitos relacionados con derechos de autor y demás, sólo hasta que pude ver su presentación decidí que voy a dedicarle un tiempo a conocer y utilizar estas herramientas. En consecuencia, no me gustó mucho, pero me convenció. Sin duda, es mejor que gustar y no convencer. Para ver si tú también te convences, revisa este ingreso.

Enseguida, Teresa Vargas nos hizo su presentación acerca de la necesidad de fomentar una Constitución para el ciberespacio, toda vez que los retos que se están presentando en ese sentido son cada vez mayores, y consideró que no se le estaba dando el alcance que realmente tiene. El tema es sumamente apasionante. No obstante, considero que le restó mucho a su ponencia el basarse excesivamente en las ideas de otro profesor, y leer demasiado (aunque en este punto no soy yo nadie para decir nada, puesto que mi ponencia fue absolutamente leída). A pesar de ello, la invitación que hizo Teresa para que realizáramos un manejo integral del tema es sumamente atrayente.

Finalizó la mesa José Antonio Galán, con el tema de la necesidad de autorregular los blogs, como forma de protección al blogger. Su presentación, que puedes revisar aquí me pareció de gran utilidad, puesto que me permitió confrontar algunos de los elementos que ya José Ramón López venía refiriendo en su blog. Adicionalmente, José Antonio nos llevó por los diferentes escenarios donde es importante la regulación en un blog, tales como el ingreso, los comentarios y las suscripciones. Cerramos la mesa con una tanda de preguntas a los ponentes, relacionadas con tan interesantes temas.

Era tarde ya, y como un aperitivo para lo que sería el delicioso ajiaco de despedida de encuentro, Gonzalo Ramírez tomó la palabra para agradecer a los presentes por su asistencia, a los ponentes por su interés y colaboración, pero sobre todo, al personal del Externado por la colaboración en montar el evento, y por supuesto, a Mariana Jaramillo, su novia, por absolutamente todo.

Esto ha sido, de manera muy pero muy resumida, lo que ocurrió en el encuentro. Como te dije antes, debíamos finalizar con un delicioso ajiaco, y en efecto, el ajiaco estuvo allí. El que no estuvo allí fui yo. Los señores de la reunión ‘cambia-vidas’ decidieron que era urgente una nueva reunión, y para ello nos convocaron a la hora de nuestro almuerzo. De hecho, mi almuerzo ese día llegó a ser las 08:00 p.m. Imperdonable. Según me dijeron, el ajiaco estuvo bien sabroso. Quizás otro día. No era tan relevante, puesto que habíamos acordado reunirnos esa noche para compartir y departir antes de partir. Sin embargo, finalizada me segunda reunión ‘cambia-vidas’, no logré averiguar en qué lugar habría de ser la reunión con los amigos blawgers. En fin… Al día siguiente habría oportunidad de despedirme.




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miércoles, 19 de agosto de 2009

Sobre el 1er Encuentro de Blawgers – Parte 2

Día 2:

Casi no logro levantarme de la cama. La sensación era como la de haber estado de fiesta toda la noche, bailando, bebiendo, gritando y gozando. Claro que en este caso, querido diario, no se había producido tal fiesta. Lo peor, es que mi día inició incluso más temprano que ayer. De hecho, me despierto y el cielo todavía está oscuro. Ni siquiera mis primas, las gaviotas californianas, osarían iniciar el día cuando aún no es de día. Es cruel, pero el derecho suele hacer de las suyas, con bastante frecuencia.

Eran las 7 de la mañana y debí acompañar a mi otro yo a dictar una clase para los muchachos de pregrado. Supongo que fue a propósito, para enervarme, pero el método que utilizó fue totalmente opuesto al que habría de defender yo más adelante en el día. Para no herir tanto mis sentimientos, quiso que la clase tuviera un toque ameno, y acudió a un par de ejemplos que yo ya he usado en mi blog. Sin embargo, cuando no se es gracioso, no se es gracioso por más que se vista uno de payaso y ponga música de circo. Independientemente de eso, debo reconocer que al menos la payasada era más formal que material. En cuanto al contenido, no hubo necesidad de picotearlo frente a sus alumnos. Al menos no hoy.

Finalmente el tedio finalizó para los alumnos a las 09:00 a.m., pero tanto el de vestido como el de plumas éramos concientes que había crisis de cafeína, y que sin solucionarla sería difícil continuar. Por ello, hubo necesidad de darle paliativo al cuerpo y reanimarlo. Así seguramente podría llegar al Salón de Profesores del Bloque G de la Universidad Externado de Colombia sin necesidad de experimentar un caso de ECM (Experiencia Cercana a la Muerte), es decir, sin tener que caminar por el túnel en búsqueda de la luz.

En efecto, llegué al salón, y ya había presentado su ponencia el “Dieguístico”. Recomiendo que revisen su blog para que conozcan el ‘detrás de bambalinas’ de su intervención, e igualmente para que revisen su ingreso sobre la malograda ponencia, que finalmente no fue malograda. Aparentemente, la red sí logra encubrir las ‘loqueras’ que luego el mismísimo Diego confesó más adelante.

La presentación que estaba en curso era la de Juan David Castro, relacionada con los podcasts. Personalmente, me dolió no haber podido estar en toda la presentación porque, aunque lo crean, cuando no juego al columnista en mi blog, juego al locutor, con el control remoto. Hubiera sido interesante aprender lo suficiente para saber si podría jugar al columnista locutor. Sí puedo afirmar, sin embargo, que la presentación de Juan David, al estilo de crónica o vivencia personal, incluyó elementos interesantes que, sin duda, servirán para que varios de nosotros nos arriesguemos en un futuro.

Inmediatamente después, vino la ponencia de Juan David Bazzani, respecto de quien confieso, querido diario, le tengo cierto rencor. Este jovencito estudiante de derecho realizó una presentación de primera categoría, como si hubiese hecho esto toda la vida. Si él supiera que me demoré aproximadamente 1 semana grabando mi propia presentación, seguramente hubiese recibido de su parte una sonrisa de consuelo y un par de palmadas en la espalda. Su presentación, contenía un mensaje claro, un lenguaje sencillo, y suficiente carisma para dominar el auditorio. Adicionalmente, contó con ayudas audiovisuales. Particularmente, la ponencia me merecía un mayor interés, porque al igual que le ocurre a los argentinos con el blog de Tomás Marino (a quien Bazzani confesó que leía), era interesante revisar grupalmente el alcance que le daba al blog jurídico, alguien quien todavía no ha sido contagiado por ese villano que nosotros llamamos lawrecht droitius, mejor conocido como “derecho”. No pretendo adelantarme a todo lo que mencionó, porque posteriormente no tendría sentido leer su ponencia en el libro que viene más adelante.

Hablando de estudiantes, Juan David Bazzani fue secundado por Julián Gil, quien además de ser estudiante de derecho, cuenta con una trayectoria profesional envidiable. Es interesante rescatar de su ponencia –que vino inmediatamente después de la de aquél– que el blog no solo constituye una forma de compartir información, y conceptos, sino que adicionalmente a través de él se puede incluso llegar a consolidar clientela. Nadie sabe quién pueda estar leyendo lo que escribimos. Creo que esta lección la debí haber aprendido aproximadamente un año antes. De haberlo hecho, probablemente no hubiera adoptado la postura de gaviota repelente, sino la de gaviota atrayente. La experiencia de Julián resultó enriquecedora, porque mostró un poco el alcance del blog en el “mundo exterior”, situación que poco se había tocado antes de su ponencia.

Terminadas estas dos intervenciones, presentó su ponencia Mariana Jaramillo, quien tuvo la genial idea de estructurar participativamente su ponencia, y la nefasta idea de sugerirme presentar mi propia ponencia. Actualmente entiendo por qué es psicóloga y no periodista. Adicionalmente, fue incorporada por Carlos Javier Delgado al club de los “hackermente éticos”. Después te explicaré a qué me refiero con eso. Ha sido tan convincente, que nos trató a todos nosotros de dummies, y terminamos dándole las gracias por ello. Yo tampoco lo entendería, querido diario, de no ser porque debes primero comprender que el dummy no es un idiota, sino un ser no especializado, pero ávido de información. Te diría más sobre la interrelación del dummy con los blogs, pero es mejor que tu y yo leamos juntos su ponencia por partes aquí (1, 2, 3, 4, 5, 6).

Quien cerró la tanda sobre “Blogs y mundos posibles” fue Roberto Fragale, juez de Brasil, y uno de los invitados internacionales que se dejaron seducir por la idea, y la insistencia de Gonzalo Ramírez Cleves. Su ponencia inicialmente trataría sobre la interrelación de los blogs con la administración de justicia, pero considero importante cambiarla por una en donde analizó su propia experiencia con el blog, valiéndose de estadísticas, estudiando cómo el blogger pasa de una etapa de hiperactividad a una normalización de frecuencias de escritura, y la forma como erróneamente se pretende generar foros de discusión mediante los comentarios. En otras palabras, consideraba que no era sensato pretender lograr lo que yo pretendía explicar en mi ponencia. El ‘parcero’ de Brasil habla un español muy bueno, y en muy pocas ocasiones requirió de traducción. Situación que me pareció muy curiosa pues aparte de este momento, no lo vi hablar en ningún otro momento del encuentro. Sin duda, hablaba cuando convenía hablar y callaba cuando convenía callar. Destaco igualmente el uso de estadística en su presentación, un recurso que no vi que nadie más utilizara, y que resultó muy revelador.

Nuevamente, la cuestión de los tiempos llevaron a que la segunda mesa, que debió iniciar en la segunda parte de la mañana, iniciara más allá de la hora del almuerzo. No obstante, los ánimos eran buenos, pues las ponencias gustaban. Además de la alteración en el tiempo, se alteró el orden en las presentaciones. Por petición de Carla Firmani, de Chile, se inició el ciclo de ponencias con la de ella, quedando Carlos Javier Delgado relegado a presentar la suya después de la mía.

Carla hizo una presentación interesante sobre la forma en que el Congreso Nacional de Chile se ha valida de las herramientas informáticas para acercar la ley a sus destinatarios, algo que normalmente suele hacerse a manera de presunción, para “evitar la fatiga”, como diría un conocido humorista. Los chilenos han utilizado diversos recursos como las radionovelas virtuales para exponer situaciones reguladas en leyes de gran importancia. Adicionalmente, me generó esperanza, al mencionar que los ‘foristas’ de la página han llegado a ser influyente en la manera como los congresistas desarrollan las normas, algo que a gran escala, podría ser sumamente útil.

Luego de Carla, vine yo. Para serte sincero, de todos los ponentes, tal vez el de esconder fui yo. Venía preparado a no ser reconocido, y presentar mi ponencia mediante un didáctico video. Fracasé en la elaboración del video, y de no ser por Gaviota´s Sibling (Trad.: “El Hermano de Gaviota”) Gaviota habría hecho el Oso, no solo metafóricamente, sino literalmente. Para que no te confundas mucho con aquello de los animales, conviene resaltar que intentando rescatar un poco de mi dignidad, decidí no pasar por cobarde, y pasar al frente mientras la presentación andaba, valiéndome de vestimente aportada amablemente por Gonzalo y Mariana. No te describo mi ponencia, porque bien sabes de qué trataba. Sin embargo, más adelante realizaré un ingreso para que puedas recordarla en caso de que lo olvides. Recibí el apoyo de mis amigos virtuales, y la traición de un amigo de mi alter ego, quien considero oportuno mencionar nombres. En conclusión, entré como un N.N., salí con nombre propio y con un tufillo de ser un poco cobarde, medio loco, medio payaso, y no muy elocuente. Como premio de consolación, puedo decir que me gané el premio al más loco de los ponentes, y eso porque afortunadamente Alberto Bovino no había logrado comunicarse. De lo contrario, habría salido con las manos vacías.

Después de esta desompensación, parecía oportuno que alguien urgentemente reanimara a la gente. El llamado era Francisco Bermudez Guerra, quien pacientemente esperaba su turno. Sin embargo, debido al desfase de horarios, que yo ayudé a crear, fue necesario reacomodar nuevamente el listado, y otorgarle el uso de la palabra a Jorge Iván Cuervo. Jorge Iván efectivamente salvó el día, pues nos brindó una nueva perspectiva del blog, como razón jurídica. Me gustó mucho su ponencia, en particular porque consideró, ante una pregunta que le formulé respecto de la postura del blogger como potencial subversivo del sistema de aprendizaje del derecho tradicional, que no solo era una posibilidad, sino un deber del blawger seer un subversivo. Debo admitir que su presentación me gustó mucho. Adicionalmente, gran mérito tiene que hubiera sacrificado parte del tiempo de una clase que debía dictar en ese momento, para presentar su ponencia ante nosotros.

Lástima el hambre. Definitivamente la carne es débil, y más aún cuando la carne está pensando en carne, preferiblemente un buen corte de churrasco. Resultó una medida humanitaria frenar el ciclo de ponencias, para efectos de permitirle a los asistentes no fallecer de inanición, que fuésemos a alimentarnos, no sin antes consultar con Francisco Bermúdez y con Carlos Javier Delgado, si había problema en reprogramar sus ponencias para el día siguiente. Ellos amablemente dieron su visto bueno.

Al regresar del almuerzo, un poco tarde, dimos inicio a la segunda tanda de talleres, liderada por Carlos Javier Delgado. Debido al cambio de personal, se repitió un poco lo del día anterior, pero brindó nuevas herramientas a los asistentes para mejorar sus blogs. Por mi parte, intenté hacer las veces de instructor respecto de una compañera que no había podido asistir el día anterior. Fracasé en el intento, pero cuando menos, logramos abrir el espacio, y subir un post. Finalizamos algo tarde la sesión. Debíamos acudir al Claustro San Agustín para un evento anexo al nuestro, pero dada la tardanza, quienes asistieron llegaron tarde y únicamente pudieron tomar un vino y algunas fotografías. Por mi parte, no pude ir con ellos, pues mi otro yo estaba enfadado y exigía que lo ayudara en el trabajo. El debía regresar a la oficina, y yo con él. No sabíamos, en ese entonces, que al día siguiente tampoco habríamos de llegar temprano al Encuentro. De eso me enteraría un par de horas después. Lo importante era que ambos habíamos sobrevivido el día. A medias, pero lo habíamos hechos, querido diario.

Cuando esos pensamientos cruzaban mi mente, claramente no estábamos bajando las interminables escaleras y luego las empinadas calles, con mocasines resbalosos, y cargados de un maletín, que parecía equipo de campaña de soldado. Mejor no te cuento lo que es resbalar en estas condiciones, y más aún si tus ‘amortiguadores’ duelen tanto. En fin, el día 2 estaba CASI llegando a su fin.




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lunes, 17 de agosto de 2009

Sobre el 1er Encuentro de Blawgers – Parte 1

Nota Preliminar:

Me gustaría decir que los tres días del encuentro se pasaron ‘volando’, pero estaría mintiendo. La verdad es que intentar compaginar agendas entre un abogado y un blogger resulta complicado, más aún si se pretende que sean dos personas diferentes. Luego de dormir unas 20 horas los últimos dos días para intentar reponer energías, he querido –con dolo directo– redactar esta serie de ingresos acerca del encuentro de blawgers, como si se tratara de un ingreso a una bitácora o diario.

Una de las cosas que aprendí en el encuentro, es que la bitácora personal ha sido gradualmente reemplazada por el blog especializado. En época en que el país está lleno de homenajes póstumos, honraré el derogado esquema a mi manera, jugando un poco con la estructura de lo nuevo y lo viejo, buscando que compartan mis vivencias en este encuentro que no olvidaré.


Día 1:

Hoy te escribo por una única y exclusiva razón: “porque mi Dios es MUY grande”. Nunca pensé que el destino me castigase de esa manera el no haber participado en la media maratón de Bogotá. Ya llegaré a este espinoso punto en algunos momentos.

Confieso que el día inició muy temprano. Existía una persistente sensación de expectativa que impedía que mi mente quisiese dormir más de lo necesario. Tan solo horas antes, me vi obligado a alterar la agenda que inicialmente tenía planteada. “La oportunidad de sus sueños, la reunión que cambiará su vida…”, ese era el mensaje principal de la llamada que me obligó a alterar mi agenda. “Excelente”, dije yo. “Que sea el viernes por la tarde”. “Miércoles a las 09:30. No hay posibilidad de cambio, lo siento.”, fue la respuesta que recibí.

La idea era sencilla. Asistiría a la inauguración del encuentro de blawgers, me escabulliría en ‘arrastre bajo’ a las 09:10, asistiría a la reunión ‘cambia-vidas’ y regresaría lo suficientemente rápido para únicamente perderme de dos o tres ponencias. Esto era lo que pensaba yo mientras mi alter ego parqueaba el carro cerca de su oficina. El debía arreglar unos asuntos antes de acompañarme a la Universidad Externado, y decidimos que nos acompañaríamos mutuamente a nuestros respectivos compromisos.

Iniciamos el recorrido, vestidos ambos con traje, corbata, zapatos mocasines y perfumados para la ocasión. El tiempo era escaso, y era preciso apurar el paso para llegar al salón designado a tiempo para la inauguración. Teniendo en cuenta que la convocatoria invitaba a llevar los propios computadores para los talleres, así como para tener conectividad a lo largo del evento, iba con mi maletín, cargado de documentos y del computador. En la subida, de la que estoy por bautizar, mi Vía Dolorosa pensaba cómo hacer para permanecer anónimo y aún así poder participar. Pensaba igualmente cómo podría compartir con los amigos, sin delatarme, mientras subía a paso raudo por la empinada calle. Finalmente, no resolví mayor cosa, y decidí simplemente inscribirme con el ID de mi otro yo.

Al llegar al salón designado, descargar el maletín y permanecer sentado algunos minutos para evitar desmayarme, no pude evitar observar dos figuras que conversaban a la distancia. Entenderán que cuando se hiperventila, no es fácil distinguir colores, figuras, y demás. Luego de que el corazón de ave decidió que no iba a infartarse aún, logré diferenciar figuras. Una de ellas era Carolina Botero, a quien había tenido la oportunidad de conocer algunos meses antes, pero con quien no había tenido la oportunidad de conversar mayor cosa. La otra era la de Carlos Javier Delgado, mi primer amigo blogger, y tal vez a quien mayor aprecio le tengo. Instantes después, entra otro gran amigo y los saluda. Era ‘un tal’ Gonzalo Ramírez Cleves, profesor del Externado, gran amigo de todos, y organizador del evento. Era imposible no reparar en quien a lo largo de los últimos dos meses había iniciado una campaña inclemente de spam informativo, y acoso jurídico-virtual. Recordé en ese instante que durante ese mismo lapso de tiempo, cuenta con una deuda que no ha saldado conmigo.

Lo obvio era acudir, y saludarlos con un gran abrazo a todos, y contarles lo feliz que estaba de verlos. Gonzalo ya me había visto antes, y como un compinche cómplice en el colegio, decidió jugar conmigo el juego del anonimato. Se acerco a mí y me saludó cordial y respetuosamente, como a los demás que nos encontrábamos en el salón. Luego pidió permiso y se retiro. Algunos minutos después, se acerco el amigo de Córdoba. Yo disimulé, revisando el programa del encuentro, y nada dije. “No pude evitar reconocerlo”, me dijo. Se sentó y hablamos trivialidades por un par de minutos. Luego se disculpó, y se alejó diciendo. “Hablamos luego”.

Surgió entonces el primer trauma. A quienes quería abrazar, y con quienes quería reírme, todos me saludaban como si fuera otro, y nos tratábamos de usted, siendo que durante más de un año, nos tuteábamos en nuestros respectivos blogs. Adicionalmente, Carlos Javier había prometido traerme unas sardinas marinadas en injusticia para reconocerme. Sin embargo, tenía muy claro desde antes, quién era yo. Confieso que este asunto, a lo largo de los tres días persistió, y nunca tuve la oportunidad de manifestar cara a cara, al par de amigos, el aprecio que sentía por ellos, y el respeto que me merecían.

Sí, querido diario. No se había inaugurado el evento, y me encontraba ya golpeado física y psicológicamente. El problema incrementó cuando descubrí que era hora de partir para la reunión ‘cambia-vidas’, y que el evento aún no se había inaugurado, porque estábamos donde estábamos. Iniciar a tiempo es cuestión de ‘intensos’, y los colombianos no nos gusta parecer demasiado intensos. Es protocolario y bien visto llegar algunos minutos después. Ello denota que somos personas ocupadas y con responsabilidades que atender.

Hablando de responsabilidades, fui y volví. La reunión no había sido tan rápida como hubiese deseado. En cuanto a si cambió mi vida o no, probablemente sí, pero se encuentra sujeto a condición suspensiva. El hecho es que regresé, y por segunda oportunidad en la mañana, debí subir la empinada calle que me conduciría al Externado. En esta ocasión, sin embargo, el afán y la adrenalina impidieron que desfalleciera en el intento.

Al llegar, me ubiqué entre el público, mientras finalizaba la exposición de Ariel Vercelli, quien presentó su ponencia a través de Skype. Inmediatamente después, vinieron algunas preguntas que se formularon a Carolina Botero, Marco Peres, y a Vercelli. Lastimosamente, no pude presenciar la presentación de los dos primeros, pero por lo que me han dicho, ambas presentaciones fueron interesantes, aunque por la temática tratada, creo que me hubiera gustado un poco más la de Carolina Botero, por los temas abordados por ella. Será importante revisar los escritos que están siendo recopilados y que ojalá se conviertan en un libro sobre el tema.

Luego de un merecido receso en el que compartimos café y pastelitos, se reanudó el evento, con la mesa que trataría la relación entre el blog jurídico y la enseñanza del derecho. Fue, tal vez, la mesa más nutrida de todo el evento. Allí expusieron Rafa Rubio, a quien debe abonársele que se encontraba en horas de la madrugada cuando inició su disertación, que fue coherente, lógica y bien planteada, aunque no estoy de acuerdo con su manera de concebir al estudiante actual, como un ser de poca habilidad y escasas aptitudes, y en cambio al profesor como un amplio conocedor que debe adaptarse al bajo nivel de sus estudiantes. Desde ese punto de vista, sus conclusiones tampoco podían ser compartidas por mí, en cuanto al manejo de la tecnología, pues partía de un punto de vista bien diferente.

Alberto Bovino, no apareció por Skype, así que no pudimos contar con su exposición, y continuó Gonzalo Ramírez, quien nos introdujo a lo que, hasta el momento, era una metodología nueva, pues pasó de la exposición objetiva, a la exposición subjetiva, vivencial, en la expuso su experiencia en los blogs, y cómo esa experiencia le permitió descubrir nuevas herramientas de enseñanza. También nos mencionó qué tan eficaz consideraba el blog como medio de enseñanza, desde su perspectiva personal. Inmediatamente después, se le dio paso a Heber Joel Campos, quien desde Perú estuvo preparado para iniciar su exposición, pero lastimosamente la comunicación falló demasiado, y era casi imposible entender lo que él nos decía. Por cuestiones de tiempo, no se pudo reanudar esta exposición más adelante.

A estas alturas, estaban pendientes por presentar su exposición Mauricio Baquero, y Gustavo Arballo. El moderador del momento, frenó la exposición sin contar con la autorización de los ponentes pendientes, y abandonó el salón junto con otra cantidad de asistentes que tenían bastante hambre, lo que generó incomodidad en algunos. La agenda estaba un poco desfasada y era importante encontrar una solución. Luego de que algunos de nosotros tratáramos el tema, se decidió que Mauricio y Gustavo presentaran al regreso de almuerzo.

Por tercera ocasión me vi obligado a bajar, esta vez por unos documentos que requería como consecuencia de la reunión ‘cambia-vidas’. Contaba con aproximadamente 40 minutos para almorzar, recoger los documentos, y realizar un par de gestiones para ayudar a mi alter ego en su trabajo. Evidentemente, el tiempo no alcanzó, a pesar de almorzar a velocidad del correcaminos. Luego de mi tercera subida al Externado, me encontré con que Gustavo Arballo estaba presentando su ponencia a los asistentes. Alcancé a llegar al final de la misma, y sin duda he constatado que este señor es muy bueno en lo que hace, y muy consistente en su forma de pensar.

Cerró la tanda Mauricio Baquero quien con sinceridad nos señaló que su experiencia bloguera arrancaba a partir de ese día, porque no contaba con blog, antes, pero explicó el alcance que el veía en materia financiera y los mecanismos de asociación que serían evidenciables a partir de esta forma de utilización del blog. Finalizada esta explicación, procedimos a acudir a una de las aulas de computación de la Universidad Externado, donde Carlos Javier Delgado nos regaló una interesante explicación sobre los blogs, y nos empezó a enseñar cómo crear blogs y escribir en ellos. Adicionalmente, por el camino, enseñaba interesantes trucos para lograr mejorar el contenido.

En el taller, aprendí que soy el único blogger al que se le ha borrado el contenido, por lo que aparentemente existen problemas serios de comprensión. Aprendí igualmente, que la forma como ahora elaboro mis ingresos, es decir, escribiendo en el procesador de palabra y luego Ctrl+C y Ctrl+V, es la forma como NO se debe hacer. Algo relacionado con sobrecargar códigos. Yo fingí entender, pero personalmente considero que ese nivel de entendimiento requiere que el personaje sea capaz de ver a través del Matrix. Personalmente, sigo sin hacer mucho caso. Imagínate que un ingreso de este tamaño se me borrara por oprimir una simple tecla. Impensable. Probablemente se me habría olvidado la mitad de lo que aquí te cuento, y nos quedaríamos los dos sin recordar lo que pasó.

Caída la tarde, y entrando en la noche, luego del taller sobre elaboración de blogs, procedí a caminar, para abajo, realizando por sexta vez el recorrido (tres para arriba y tres para abajo). Esta vez, no había mayor afán. Era posible reposar ideas y absorber lo aprendido, mientras que descendía lentamente, rumbo a casa. No sabría lo que el día siguiente me depararía, pero entendí que también habría de perderme algunas conferencias en horas de la mañana. “No importa”, me dije a mí mismo. Lo importante es estar lo más que pueda, y aprovechar la oportunidad que desde hace tanto estaba esperando.




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viernes, 14 de agosto de 2009

Fin del encuentro, y algunas preguntas

El 1er Encuentro de Blawgers –del que todavía no existe certeza si es el primero o es el segundo– ha llegado a su fin, y ante esta dolorosa (por haber terminado) pero alegre (por acentuar la amistad, el gusto por el derecho y la interrelación de conceptos y culturas) situación, debemos destacar el gran esfuerzo desplegado por los ponentes vituales, por quienes en horabuena tomaron la decisión de viajar y venir a participar, valiéndose de sus propios medios, por la Universidad Externado que le apostó a esta loca idea, por quienes participamos activamente en el encuentro de una u otra manera, pero sobre todo, por nuestro organizador, coordinador y motivador, Gonzalo Ramírez Cleves, estandarte e ícono del evento. Especialmente, debemos abonarle el haber demostrado empíricamente por qué el spam sigue vigente, con ejemplos ilustrativos de su ponencia oculta “Cómo un blogger puede acabar con correos electrónicos”. Exhorto a Gonzalo a que realice un análisis escrito de su experiencia en el mundo del spam, y que lo comparta con sus víctimas.

Me encuentro en estos momentos codificando y sistematizando todo lo que pude vivir en el encuentro, intentando desentrañar mensajes encriptados en las ponencias, y reviviendo sensaciones, con miras a poder realizar una serie de ingresos al respecto, que iniciarán a partir de la próxima entrada.

Por ahora, en la compañía de la fría noche y de buenos recuerdos, no puedo dejar pasar una serie de inquietudes que me han acompañado hace algún tiempo y que me gustaría lanzar a la blogósfera, para ver si los lectores de este espacio me pueden brindar “una manito”, y permitirme evitar algunas horas de insomnio.

Helas aquí:

1) ¿Por qué razón Gonzalo tuvo tiempo para enviar spam, subir notas a Iureamicorum, otras a la página del encuentro, pero no lo tuvo para publicar su perfil en la página del encuentro?

2) ¿Por qué Gaviota llegó para picotear y salió desplumado y desenmascarado?

3) ¿Por qué Roberto Fragale habla mejor el español que muchos de los que teóricamente sí hablamos español?

4) ¿Por qué la Universidad Externado no fomenta un proyecto para redefinir el concepto de ‘AUXILIO de transporte’?

5) ¿Por qué razón nos asombramos más en los talleres de Carlos Javier Delgado quienes ya contábamos con blogs, y no tanto los que nunca habían abierto uno?

6) ¿Qué come Gustavo Arballo, para que comparta el menú con nosotros?

7) Por qué la mesa donde estuvo Cuervo y Gaviota no se tituló, “Los voladores del derecho virtual”, o en su defecto “Los virtuales voladores del derecho”?

8) ¿Por qué a pesar de cuestionárnoslo varias veces, nadie logró entender cómo hace Alberto Bovino para publicar tanto y tan seguido?

9) ¿Por qué ante tanto blogger díscolo no se incluyó una ponencia titulada “El blogger y la sanidad mental: una relación inversamente proporcional”?

10) ¿Por qué los externadistas no son representantes del país en pruebas atléticas de resistencia?

11) ¿Por qué si los blogs están tan muertos, estamos tan vivos?

12) ¿Por qué, si no estamos reglados ni regulados, queremos autorregularnos, si no nos gusta ser regulados?

13) Ante toda esta cantidad de ponencias con posturas diferentes de quienes creemos entender los blogs, me pregunto ¿será que alguno de nosotros realmente entiende de blogs?

14) Si alguien efectivamente lo entiende, ¿por qué los demás entendemos algo diferente?

Reitero que el ejercicio ha sido ‘delicioso’, muy a pesar de que no pude probar ni la copa de vino, ni el ajiaco tan anhelado. Ojalá que este mecanismo que se ha puesto en marcha, siga en marcha, y nosotros sigamos marchando junto a él. Mis respetos a todos quienes han participado de esta iniciativa. Bienvenida la discusión, y bienvenidos todos los que se han dejado seducir por el movimiento… En horabuena.
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lunes, 10 de agosto de 2009

Poesía Jurídica Vol. 2

Sin comentarios adicionales.


Dominio

Resulta inane pretender soslayarlo,
Desentrañar si era el giro esperado del destino.
Difusa y Abstracta fue mi sensación de posesión.
Sensación que indujo al abuso de tu derecho,
De alejarte y reivindicar lo que siempre fue mío.

Ha sido este tu dominio de mi extinción,
Titularidad del fin del camino.
Ha sido esta la extinción de mi dominio,
La extracción del más puro sentimiento.

No hay uso de mis facultades, lo sabes bien.
No hay goce de la vida, carece ya de sentido.
No hay disposición, más que de esta simple elegía.

Es preciso reiterarte amor,
Que lo vivido por el azar no ha sido.
Fui tu alfa y tú mi uno,
Nadie más ocupará de nuevo estos corazones.

Es momento de formular mi excepción.
Aunque haya perdido ya el dominio de mí mismo.
¿Cómo y cuándo dominé sin haber poseído?
¿Cómo y cuando poseí sin haber dominado?
Interdicto, sin haber podido soslayarlo.
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viernes, 7 de agosto de 2009

“Pase usted, Doña Elisabeth Ungar Bleier”

La Corporación Transparencia por Colombia estrena directora ejecutiva. A partir de este mes, Elisabeth Ungar Bleier, otro de aquellos ejemplos de que es mejor ser Ungar que López, entra a desempeñar el cargo de directora, luego de haberse desempeñado como Directora de “Congreso Visible”, programa del Departamento de Ciencias Políticas de la Universidad de los Andes.


Imagen tomada de: http://www.bbc.co.uk


Desde el ingreso anterior, cuando hice referencia a “Elección Visible”, debo admitir que tuve principalmente en mente a la señora Ungar Bleier, por cuanto su posición le ha permitido influir decisivamente en diferentes escenarios de la vida pública, pero sin lograr demasiados resultados, según mi parecer. La señora Ungar lideró “Congreso Visible”, desde su fundación en el año 1998 hasta Julio de 2009. Evidentemente el programa tiene logros indiscutibles, pero podemos afirmar que en once años no logró el objeto de que existiera un Congreso Visible. De hecho, son 3 “Congresos” no visibles, pues ha habido tres elecciones

Adicionalmente, debo manifestar mi inconformidad con la señora Ungar Bleier, toda vez que a raíz de su cargo, ha tenido la oportunidad de escribir en algunos de los medios de comunicación –ella es columnista del diario El Espectador– pero realmente no utiliza la oportunidad para trabajar por los fines altruistas para los cuales se manifiesta trabajar.

Esta situación me recuerda a un profesor, cuyo nombre no mencionaré, quien desde hace mucho tiempo señala que esta clase de organizaciones, llámense como se llamen, no viven por los derechos humanos, sino de los derechos humanos. Probablemente su postura sería algo así como, “¿y qué utilidad tendría Congreso Visible si ya fuera visible? Se perdería el objetivo, y probablemente la señora Elisabeth Ungar y Cia. deberían dedicarse a algo diferente.

En principio, escuchar ese comentario resulta ofensivo para quien no conoce a quien profiere esas palabras. Incluso, la primera que yo oí esta clase de comentarios por parte del anónimo profesor, me pareció jocosa la manera en que lo retrató, pero injusta en su contenido. Sin embargo, como con casi todos los comentarios que de manera instantánea generan rechazo, conviene repensar su contenido, para saber si además del rechazo pasional existe un rechazo racional.

Personalmente, soy de la línea del anónimo profesor. No tengo confianza en el altruismo sin ánimo de lucro. De hecho, considero que esa frase sirve de caballito de batalla para pretender demostrar que los derechos humanos, la justicia, la transparencia y la visibilidad no se tratan de negocios sino de programas de largo plazo tendientes a mejorar el mundo.

Para quienes no lo saben, les cuento que el estatuto tributario de Colombia prevé deducciones para quienes realicen donaciones a esta clase de organizaciones. De hecho, en el caso de los derechos humanos y acceso a la justicia, las deducciones equivalen a un 125% del valor donado (Artículo 126-2 del Estatuto Tributario). En términos prácticos, eso quiere decir que si debemos pagar impuesto a la renta y donamos 100 pesos, podemos descontar 125 pesos del monto total de impuestos a pagar. ¿Consideran ustedes que podría haber recursos para esta clase de organizaciones? Por supuesto que sí. Recordemos que una de las razones por las cuales las personas deciden hacer algo es por sentirse importantes. Si puedo afirmar ante el mundo entero que soy benefactor de una organización que hace bien para la humanidad, pero también al hacerlo logró ahorrar dinero, ¿por qué no hacerlo?

Independientemente de si me gusta como está elaborada la norma, tengo la claridad de que solo así podría existir la contribución sistemática a esta clase de situaciones. Si los impuestos etán destinados, en parte, a la financiación de esa clase de programas, ¿por qué no financiar directamente a las organizaciones que conocen el tema y lo pueden manejar mejor? El problema radica en las organizaciones en sí. Hay gente interesada en ser benefactores de esta clase de programas, y por lo tanto, existen recursos garantizados. Recordemos que es rentable, y nos permite mostrarnos como grandes benefactores de la sociedad. Así, el dinero existe.

Si existe la demanda, la oferta surgirá. Así suele funcionar el mercado, a cualquier nivel. Surgen organizaciones como Corporación Transparencia por Colombia, Corporación Excelencia en la Justicia, por solo mencionar las más conocidas de todas estas organizaciones, y algunas programas o institutos adscritos a universidades, como es el caso de Congreso Visible, programa dirigido por la señora Elisabeth Ungar hasta hace poco tiempo. Invito a todos mis lectores a que pasen por la página web de Congreso Visible para que revisen el contenido de la misma, y especialmente, para revisar los proyectos, los eventos, y especialmente para revisar los informes que después de algún tiempo, podrán ubicar. Me gustaría conocer sus impresiones. Personalmente, considero que no es serio promocionarse como lo hace Congreso Visible, y como lo ha hecho su exdirectora, y tener una información tan precaria en su página web. ¿Cómo hacemos visible a Congreso Visible? No lo sé.

Sería interesante conocer de la señora Ungar Bleier algo relacionado con el presupuesto que manejó en esa organización y la forma como se invirtió. En el caso de Corporación Transparencia por Colombia, esa información sí existe, y está disponible para ser consultada y revisada en su página web. Esperemos que la nueva dirección no traiga los vicios informativos de Congreso Visible, pues sería una lástima volver invisible lo que hasta el momento ha mostrado ser transparente. Precisamente, esa transparencia en las cifras es lo que permite racionalmente preguntarse si el profesor anónimo podría tener algo de razón en lo que dice.

Señora Ungar, el Congreso no es visible, y tampoco es transparente. Sería bueno saber por qué el cambio de un lugar a otro, más allá del factor económico, que sin duda habrá tenido algo que ver. Sería interesante saber cuáles fueron los criterios de elección de la nueva directora de la Corporación Transparencia de Colombia. Sin duda su hoja de vida tendrá elementos interesantes, pero junto con una hoja de vida, es importante conocer los resultados obtenidos en el devenir profesional del candidato o candidata. Ya que no pudimos enterarnos a través de la página de Congreso Visible, sería bueno que los promotores de la visibilidad y transparencia se hagan a sí mismos visibles.

Más allá del toque de hilaridad que quiso incluir en su chat con el diario El Espectador hace algunos días, reconoce que el tema de la visibilidad en el Congreso le quedó grande. Esperemos que su desempeño al mando de la Corporación Transparencia no siga la misma suerte. Tal vez, si se concentra más en lograr un trabajo serio, y no tanto en figurar, el desempeño mejorará. No obstante, me temo que los rubros dedicados a presentaciones y eventos en grandes y lujosos salones de conferencia de importantes hoteles y centros de convenciones, podrían ascender. Lamentablemente, eso aquí no es un problema. Recordemos que ser solidario en materia de ONG´s es un buen negocio. Picotazo preventivo para la señor Elisabeth Ungar. Bienvenida a este espacio. Por el bien del país, esperemos que sea la última vez que sea referenciada aquí.

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sábado, 1 de agosto de 2009

Sobre “Elección Visible – Fiscal General” y otras bellezas

El día de hoy, he tenido la oportunidad de respirar con tranquilidad al menos 30 segundos, es toda una alegría. Ha sido una semana complicada entre los requerimientos del abogado con el que convivo a diario, así como por el cumplimiento de compromisos para el I Encuentro de Blawgers. Respecto del primero de los casos, hay que entender que además de escribir y picotear, es indispensable recaudar fondos para alimentar a Gaviota, y de paso, pagar las cuentas. Eso implica que debo dejar importunarme por sus afanes y preocupaciones. En cuanto al cumplimiento de los compromisos con el encuentro de Blawgers, era importante cumplir con las fechas límites fijadas. Estuve tranquilo porque tenía entendido que vencía ayer, y ayer oficialmente hice entrega por escrito de mi ponencia. Sin embargo, revisando las comunicaciones oficiales, el término para entregarlas vencía el 30 y no el 31, como suponía yo. De todas formas, ya existe comunicación oficial que da por recibido el documento. ¡Clasifiqué!

Es día de reposo físico. Después de toda tormenta, viene la calma, al menos la calma física. Sin embargo, mi pico padece de síndrome de abstinencia y ha decidido desde temprano hacerme despertar para volver a trabajar. Lo del abogado es problema de él, y en cuanto a lo de la ponencia, el futuro nos dirá si fue bien recibida, o no. También sabremos si ha podido ser de alguna utilidad. Las gaviotas deben volar desde temprano. Mi primer vuelo, de acuerdo a lo fijado en el plan de vuelo, fue al blog de Gonzalo, quien se fajó una gran crónica personal sobre su experiencia con Luis Carlos Galán. Lo destaco, porque más allá del excelente escrito, Gonzalo nos regala una grabación de Caracol Radio, en la que se escuchan fragmentos de entrevistas y de discursos de Galán.

En uno de estos fragmentos, nos menciona Galán los problemas de narcotráfico, y como no debe entenderse esa lucha como la lucha de algunos, de moralistas ilusos, sino como una lucha global y que nos debe importar a todos. Parece ser que no muchos escucharon eso, en su momento. Sin duda, no lo escucharon los que debían investigar y juzgar su muerte. La reapertura del proceso, tan publicitada por nuestro saliente fiscal ha sido otra razón más para avergonzarnos de la ineficiencia. Estamos a treinta días de que prescriban esos delitos.

Leer el buen ingreso de Gonzalo disipó un poco el cansancio que me embarga. Por algún motivo especial, escuchar a este líder, sus ideas, así como la manera en que tantos recuerdan sus palabras y dicen ser seguidores de estos ideales, me llevó a seguir revisando la red. Por supuesto, revisé las páginas que usualmente reviso, para enterarme de los nuevos ingresos de mis colegas bloggers. Tuve la oportunidad de leer un ingreso de Atrabilioso, denunciando la manera en que el gobernante venezolano se encuentra empecinado en procurar su inmunidad, valiéndose del ataque sistemático de sus opositores. Censura, utilización indebida del aparato estatal, y la inmoralidad son solo algunas de las denuncias que allí se observan.

Han pasado 20 años desde que murió Galán, y al leer estos artículos me obligo a reflexionar. ¿Qué tanto ha cambiado el mundo, el país, el alma del colombiano desde que falleció este importante líder? Parece ser que no mucho. Al menos, no para bien. En la actualidad nos encontramos con el reto de procurar la elección del sucesor de Mario Iguarán, Fiscal General de la Nación saliente. Lo que se conoce de este reto, es que estamos ante la elección, que muchos consideran que se encuentra viciada. Al parecer, no hay mucho que elegir, y la Corte Suprema lo sabe. Al menos, no existe candidato que genere esperanza. Qué será el futuro de la elección, poco o nada se sabe. En cuanto a ella, sin embargo, contamos hoy con la intervención de veedores, vigilantes ciudadanos en ONG´s dedicadas a esta clase de cuestiones.

Para la elección del fiscal, se llegó a una alianza de varias estas organizaciones, con la finalidad de garantizar transparencia en la elección. La veeduría estaría diseñada para evitar que se llegara a situaciones antijurídicas, antiéticas, o similares, en una elección tan fundamental como la del Fiscal General de la Nación. Sin embargo, parece ser que la veeduría es tan respetuosa que no es clara. Ante las versiones que empantanan la legitimidad de algunos de los candidatos, y ante el clamor de parte de la opinión pública porque se rechace la terna propuesta por el Presidente Uribe, “Elección Visible”, la alianza creada por estas organizaciones para vigilar este proceso de selección, se limita a recomendarle a los candidatos que retiren sus candidaturas. Para revisar este escueto comunicado, que deja mucho para desear, y que da para cuestionar grandemente la labor que se desempeña por parte de esta alianza, los invito a que revisen el comunicado aquí.

Revisado ese comunicado, y ante el peso y la presunta legitimidad que tienen las organizaciones que poseen estas alianzas, conviene preguntarse cuál es realmente la función social que desempeñan. Si están convencidos de que lo mejor para el país es que no elijan a ninguno de los candidatos, ‘invitaría’ comedidamente a esta alianza a que asuma con propiedad su función, y deje de ‘invitar’, o recomendar que retiren sus candidaturas. Los veedores con carácter, no recomiendan, sino que exigen. Si son estas las entidades encargadas de velar por la transparencia, por la excelencia, por la visibilidad, y por la legitimidad, no sería la extrema cortesía lo más conveniente aquí, sino que prevalece los intereses que dicen proteger.

La pregunta que surge es, si ante estas muestras de extrema cortesía, no convendría repensar los modelos de vigilancia y seguimiento que actualmente existen. Finalmente, las entidades de vigilancia requieren financiamiento, estas entidades se ven financiadas por empresas o personas que sí se pueden ver afectadas por esta clase de decisiones. ¿Será que esto afecta la objetividad de las ONG´s, o de las instituciones adscritas a universidades? Considero que sí, y que ante esta situación, no podrán hacer nada contra la elección de quien está llamado a ser el elegido. Cuestiono el método, no la decisión. Es mucho dinero el que se invierte en esta clase de seguimientos, y hasta la fecha, estos seguimientos no han logrado realmente ningún avance. Para la muestra, recordemos las elecciones para Magistrados de la Corte Constitucional.

Paz en la tumba de Luis Carlos Galán. Para aquellos que permanecemos, ojalá lográramos interiorizar al menos uno de los retos que este gran líder asumió por nosotros.
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